Sobre la arena, hasta donde llega la vista hay instaladas redes de voley playa. Decenas de jugadores de toda edad y condición se reúnen para practicar este deporte que año tras año gana más adeptos. No en vano Mallorca tiene el clima y kilómetros de superficie ideal para el juego. Estamos en la playa de Palmanova una calurosa tarde de agosto. Néstor Serron y Nicolás Zanotta dirigen el entrenamiento de dos grupos de chicas. Procedentes de Uruguay, Serron y Zanotta comenzaron a entrenar a pequeños grupos en febrero de 2017. Ahora dirigen el juego de más de 50 personas. "Vimos que en Mallorca había mucha afición por el voley playa, pero que nadie hacía trabajos dirigidos a nivel de entrenamiento y se nos ocurrió empezar con grupos", explica Néstor Serron. Las sesiones se realizan una vez por semana y tienen una duración de dos horas. Ambos entrenadores coinciden en que el voley playa es un deporte muy completo y exigente: "Físicamente y mentalmente, te exige mucho y hace que siempre estés atento. Son dos jugadores en el campo y si la pelota no es tuya es mía", argumenta Néstor. Por su parte, Nicolás Zanotta añade: "Siempre estás en contacto con el balón y siempre hay que estar solucionando problemas: tienes viento, tienes sol, tienes lluvia y contra todo eso y con tu compañero, sales adelante".
Las mujeres son mayoría en estos entrenos, al igual que en la federación balear. No ocurre así en las competiciones donde son más los hombres. Sin embargo, Néstor apunta que en estos momentos la participación en torneos se está empezando a igualar.
Después de practicar voley en pista durante diez años, Joana ha decidido cambiar de superficie: "Es una práctica muy bonita y no es de contacto. Es un deporte de pensar y aunque no lo parezca hay mucha destreza, no se trata de tener fuerza. Después de entrenar te das cuenta de que has avanzado. Néstor y Nicolás tienen una técnica buenísima", explica. Malena también destaca la adquisición de estas habilidades: "Había jugado voley playa toda la vida con amigos y veíamos que no mejorábamos. Aquí, con sólo tres clases ya he avanzado. La posición de los brazos y de las piernas, donde pones los pesos; es muy importante". Tina es la pareja de juego de Malena. Como anécdota señala que sus maridos también forman tándem y que sus hijas compiten juntas en categoría infantil.
Por su parte Joanna, procedente de Polonia, explica que este año ha participado en su primer torneo: "Empecé a jugar el verano pasado. Vine a Mallorca para trabajar y me apunté con una amiga. Es muy divertido y conoces a mucha gente. Este año he vuelto para trabajar, pero también para entrenar".
La buena técnica está en las piernas
Una buena técnica es la base para practicar un buen juego, pero Nicolás Zanotta destaca que lo fundamental es fijarse en la base; en las piernas, para después corregir la parte superior: "Los pasos, la parte de la pierna, es lo primero que hay que controlar. La gente que empieza piensa que hace mal un ejercicio por un mal control de los brazos y el error está en la base. Si la colocación de las piernas no es correcta, me lleva a errar arriba", explica. Nicolás Zanotta que compite en el equipo nacional de Uruguay y que es uno de los mejores jugadores del circuito de España, tiene claras las ventajas de esta modalidad: "Es un deporte colectivo, que se juega al aire libre, con poca ropa, te puedes tirar. Aunque la arena sea una superficie inestable, se trabaja mucho la propiacepción de los tobillos y rodillas y es muy difícil que se genere una lesión", argumenta.
