La victoria del Palma Air Europa, el pasado sábado, ante el Prat y las derrota de sus tres máximos perseguidores, Melilla, Barça B y Amics de Castelló, acercan al conjunto de Ángel Cepeda a la clasificación de la Copa Princesa, a falta de cuatro jornadas de la conclusión de la primera vuelta. Tras la pasada jornada, el cuadro mallorquín aventaja a sus rivales más próximos por dos victorias y se mantiene en segunda posición a un triunfo del intratable Palencia, que solventó su último compromiso en la difícil cancha del filial del Barcelona Lassa.

Con este panorama, el Palma se aseguraría su presencia en la final copera con tres triunfos en los cuatro compromisos restantes. Esto en el caso de que alguno de sus cuatro máximos perseguidores ganaran todos sus encuentros. De no ser así, les bastaría con dos triunfos. Otro dato a tener en cuenta es la diferencia de puntos de todos los equipos, que en caso de empate podría decidir quién entra en Copa. El Palma supera a todos sus rivales directos, excepto Melilla y el líder Palencia, en este apartado con una diferencia positiva de 73 puntos. Melilla cuenta con 118 puntos a favor más que en contra y Palencia con 140. Por detrás, Barça +19, Amics de Castelló + 15 y Oviedo, que ha recibido 13 puntos más de los que ha anotado. En este sentido, la lógica dice que el Palma ganaría en cualquier empate, excepto ante el conjunto melillense, que en la última jornada de la primera vuelta tiene que visitar al Palencia.

Aunque todavía no se ha decidido nada, el Palma afronta un escenario propicio para lograr la segunda plaza, que da ese billete para la Copa Princesa. Más complicado lo tiene para lograr la organización de la final. Para que eso se pueda producir, el Palencia tendría que perder al menos dos encuentros, algo que parece complicado por la solvencia con lo que está resolviendo sus últimos choques. Desde el Palma se afronta con ilusión la opción de disputar la final copera en busca del primer título de la entidad del Arenal y con la oportunidad de convertirse en el primer conjunto balear en hacerse con el título copero de la LEB Oro, en la que sería la vigésimasexta edición de esta competición.