El Real Mallorca ya tiene a un lanzador de penaltis fiable. De esos que garantizan el gol por muy complicada que sea la situación o por muchos nervios que haya entre los aficionados. Y Tomer Hemed (Haifa, 1987) es uno de ellos. El sábado volvió a demostrar que desde los once metros es infalible. Quiso asumir el protagonismo ante el Valencia justo cuando era más complicado. Como si fuera el guion de una película, Paradas Romero señaló penalti en el minuto noventa y uno, justo cuando ya no había margen para nada más.

?Los rojillos tenían la ocasión de salvar un punto ante un rival de postín, un magnífico resultado en el estreno de Caparrós en el banquillo, sobre todo visto lo visto. Y su pie no tembló. Todo lo contrario. El israelí lo tiró con maestría, con una pasmosa tranquilidad, a la derecha de la portería defendida por Guaita. Una auténtica fotocopia de los dos que lanzó hace dos semanas en Pamplona y que sirvieron para arrancar un valioso punto del Reyno de Navarra. El primero sirvió para adelantar a los isleños, pero el más complicado, con 2-1 y jugando con diez –habían expulsado a Nsue– fue solucionado con valentía y sin que el pulso le temblara.

?Su estilo ya es inconfundible. Una ligera carrera hacia el balón, apenas tres zancadas, y golpeo suave con el interior de la bota al lado contrario del que se lanza el portero. Y gol. Así ha sucedido en los tres que ha tirado hasta el momento, una excelente noticia para los suyos, sobre todo porque en la historia reciente del Real Mallorca figuran demasiadas decepciones en este aspecto.

?No hace tanto que en Son Moix estaba instalado el debate sobre quién debía lanzar los penaltis. Incluso a Gregorio Manzano llegó a desquiciarle el asunto, que siempre zanjaba con una frase. "Lo tira el que mejor está", señalaba el entonces entrenador del Mallorca, que en su segunda etapa fue el inquilino del banquillo entre febrero de 2006 y junio de 2010. Aduriz y Martí fallaron en su momento, pero tampoco hace falta remontarse tan atrás para hablar de errores desde los once metros. Michael Laudrup también vivió este problema el curso anterior porque su Mallorca falló cuatro entre la Liga y la Copa del Rey. Castro perdonó ante Kameni en la jornada veintiséis en un choque ante el Espanyol; Webó erró en la diecinueve, ante De Gea, en el Atlético-Mallorca y en el torneo del KO ante el Sporting, Cavenaghi marcó después del rechace y Víctor, en Almería, estrelló el balón en el meta Esteban.

?No obstante, parece que esta falta de acierto en las penas máximas será historia. Hemed quiere triunfar en el Mallorca y, a pesar de su falta de acierto en acciones de juego, los tres tantos que acumula le proporcionan la confianza que necesita. Ahora le queda resolver esta gran asignatura pendiente. Desde la pretemporada en Oosterbeek (Holanda), los elogios se habían sucedido sobre la labor del internacional, que cae bien a bandas, que asiste a sus compañeros y que da trabajo a los centrales rivales, pero quiere marcar goles. Es lo suyo.

?Llegó siendo un auténtico desconocido, aunque en su país había marcado doce tantos en la Liga y tres en la Copa con el Maccabi Haifa. Eso le sirvió para vestir la camiseta de su selección compartiendo vestuario con su inseparable Aouate. Frente al Valencia lo intentó de todas las maneras, con la cabeza y con las dos piernas, pero no hubo manera. Hasta que llegó su gran oportunidad. Sin tensión y con acierto. "Lo importante es poder ayudar al equipo", dijo después del encuentro. Y de momento lo está consiguiendo.