El asunto es tan complicado como enrevesado. Voy a intentar explicarlo de la forma más clara y escueta posible. A finales de la temporada 09-10, el Menorca logra su segundo ascenso a la ACB. No tiene el millón setecientos mil euros necesarios para hacer frente al fondo de ascensos y descensos. El Govern del Pacte le hace un crédito puente que en un futuro próximo el Menorca debe asumir. En noviembre, el Govern pide al Menorca que asuma el crédito.

Pero ni caso. En lugar de presentar una demanda, el Govern insiste en diciembre, y también en enero, febrero, etcétera. Pero nada. Acaba la Liga, el Menorca desciende y semanas después se declara en concurso de acreedores. En base a ello, llevan a cabo la jugada maestra. Reclaman a la ACB el millón setecientos mil euros. El dinero, recordemos, es del Govern, pero el Menorca está en suspensión de pagos, el Govern pasa a engrosar la lista de acreedores y el Menorca puede permitirse el lujo de fichar a todo lo que se mueve en el mundo del baloncesto con este millón setecientos mil euros, un dinero que no es suyo.

Imagino que estaremos de acuerdo en que hablamos de una chorizada. Aunque a la menorquina que, después de todo, no es mejor, ni peor, que una mallorquina o ibicenca. Y si el Govern dice querer cobrar, lo dice con la boca pequeña. No quieren que en Menorca se enfaden. A los políticos (sean de la tendencia que sean) les cuesta mucho incomodar a menorquines e ibicencos. Así las cosas, por tanto, al Govern le han cepillado un millón setecientos mil euros.

Celebro que Antonio Gómez, el nuevo director general de IB3 a tiempo parcial, a la vez que consejero de Presidencia para completar la jornada (quina vergonya. Bauzá, ni el Caudillo se atrevió a tanto), me haya hecho caso y decidido suprimir el fútbol de Primera y la Fórmula 1 (y supongo que la Liga de Campeones). Que siga recortando, que en deportes todavía queda margen. Aplicando un recorte sustancial del contrato con el Mallorca y marcando las reglas de juego a equipos de voleibol, baloncesto, Segunda B, Tercera, hockey, fútbol sala y lo que sea, se ahorrarían un pastón. Se lo digo yo.

la nadadora melanie costa se quejaba ayer a mi compa y amigo Manolo Fernández por lo poco que se han valorado sus últimos resultados. Melanie no sabe que estamos rodeados de incompetentes. Por ejemplo ¿dónde estaban los políticos, y también mi amigo Jaume Estarellas, presidente de la Balear de Bàsquet, el pasado lunes, cuando llegaba a Palma el baloncestista Alex Abrines con una medalla de oro colgada del cuello?

Josep Lluís Madico, amigo mío y exconcejal de Deportes del Ayuntamiento de Palma, reclama primarias en el PSOE porque quiere encabezar la lista para ir al Senado a levantar la mano, puesto que ocupa ahora el inquer Xavier Ramis. No cabe esperar mucho de Madico, pero peor que Ramis, seguro que no lo hará.

A cada día que pasa, el proyecto mallorquinista/especulativo de volver al Lluís Sitjar se me antoja más absurdo y utópico.