Hace tres escasas semanas que Adam Zagajewski pasó felizmente por la isla y revivió su gran pasión por el mar mallorquín. Fue uno de los grandes protagonistas de la Nit de la Poesia, el plato fuerte del Festival de la Mediterrània, dirigido por el escritor y articulista de este diario Biel Mesquida. En septiembre del año pasado el poeta polaco también aterrizó en la isla para participar en la primera edición de Habitació 2016, un programa de escritor en residencia en el hotel rural Son Jaumell de Capdepera. La iniciativa, un espacio de libertad creativa, pretendía generar un debate en torno a las relaciones entre el turismo y la cultura. El autor mantiene una relación con Mallorca desde 2005, cuando descubrió la isla y con ella al pintor Miquel Barceló. "Aquello fue el inicio de una gran simpatía por Mallorca", reconoció. El autor de obras como Solidaridad y soledad o Carnicerías reivindica que "la poesía es un valor esencial". Se define como un "líbero entre la cultura de masas y la vida espiritual".