- Llegan colgando el cartel de todo vendido por todas las ciudades en las que han tocado.
- La verdad es que sí, estamos muy felices porque la gente ha conectado con el nuevo disco, se ha vuelto a emocionar con nosotros y nos quieren ver en directo.
- Después de cinco años desde el último disco, ¿ temían por la reacción de sus seguidores?
- Bueno, miedo no, fíjate cómo ha cambiado este país. Hace cinco años no existía ni Podemos, nosotros empezamos a escribir canciones hace dos años, buscando en nuestras emociones e intentando tocar esos temas que nos preocupan, que creemos que a la gente le interesan y buscando esa conexión de la música con la sociedad.
- En búsqueda de esa conexión, ceden los temas románticos a los problemas sociales como la violencia de género o la inmigración.
- Hemos sentido esa necesidad de componer temas tan delicados, hay que ser muy quirúrgico con las palabras y las imágenes. Por ejemplo en No vales más que yo, se habla de uno de los mayores problemas de la sociedad mundial como es el machismo y la violencia de género. Debe hacerse visible y, a poco a poco, a base de educación, demostrar que todos somos iguales y las relaciones deben basarse en el respeto y no anular a tu pareja, es que es repugnante. A través de las canciones queremos que la gente se conciencie y sobre todo los hombres que son los que tenemos que frenar esto. Además, no sólo está el objetivo de hacer visible el problema, sino también ayudar a que las mujeres que lo sufren se sientan arropadas, que la gran mayoría de la población condena esa situación y que es posible dar la vuelta a la situación.
- En Estoy contigo tratan también un tema presente en la sociedad como es el alzheimer. ¿Hay desahogo personal en este nuevo disco?
- Siempre, directa o indirectamente. Son temas que quien más quien menos los ha vivido de cerca. Con esta canción hemos querido dar un abrazo a las familias que pasan por esta terrible enfermedad. Al final, miras a tu alrededor, y las palabras ´cáncer´ y ´alzheimer´ siempre están ahí.
- Han ido evolucionando, pero algo que os caracteriza es que os mantenéis fieles a vuestro estilo. ¿Alguna vez os habéis planteado un cambio de registro?
-Intentamos siempre evolucionar, estamos muy al día de la música que suena en España y en el mundo. En todos nuestros discos hay experimentos o canciones con otro color, en este tenemos Camino de tu corazón como ejemplo. Pero la letra es nuestra identidad, pretendemos escribir mejor, pero hay una parte del tacto que no podemos ni queremos cambiar.
- ¿Qué diferencia este disco del resto?
- El fondo de las canciones. Es un disco que nos ha costado mucho. El haber escrito tantas letras es algo que cada vez pesa más porque te quieres superar y nosotros somos muy autoexigentes. Creemos que es un disco con un tono más emocional donde intentamos pellizcar más las emociones del público.
- ¿Creen que su público de cuando empezaron en el 98 es el mismo que el de ahora?
Hay muchos que sí y otros que no pero hay algo maravilloso y es que ya hemos pasado generaciones. Hay gente que conocimos siendo prácticamente adolescentes que ahora vienen con sus hijos; o sus hijos ya han entrado en nuestro ´planeta imaginario´.
- ¿La elección del título tiene algo que ver con el programa infantil de los 80?
- La verdad es que no. El planeta imaginario es ese mundo que nos permite vivir experiencias extraordinarias. Nosotros seguimos viviendo en San Sebastián, y llevamos una vida normal; pero cuando nos juntamos los cinco ocurre algo maravilloso como es el escribir canciones, viajar o dar conciertos. Nuestro planeta imaginario está muy conectado con la vida real, te crees parte porque eres consciente de la responsabilidad a la hora de dar un concierto pero luego hay parte de todo esto que tiene que ver con la fama frívola y que nosotros no nos llegamos a creer.
- A la hora de componer, ¿ quién lleva la voz cantante?
- Todos. Hemos crecido juntos, realmente nadie nos ha enseñado. Cuando nos sentamos a componer, quedamos en un local todos los días a las 9.30, una hora prudente que no necesita madrugón, desayunamos y comenzamos a trabajar. Esta rutina es un poco el alma del grupo, reunirnos, modular las ideas, este ritual juntos nos da mucha confianza y seguridad porque multiplicas las alegrías y divides las tristezas. Es una fórmula que nos ha funcionado y además no conocemos otra.
- Más de 100 conciertos por Latinoamérica. ¿Ha dejado poso en el disco?
- Mucho, la canción que te nombraba antes, Camino de tu corazón, habla un poco de todos esos españoles que nos encontramos que viven ahí porque no les ha quedado otro remedio al no encontrar trabajo en sus ciudades; y también de la historia al revés, aquellos que vienen a España. Por supuesto seguimos hablando de relaciones y rupturas pero ya desde un punto de vista más adulta. El amor tiene un montón de aristas, hacia tus padres, tus hijos, los amigos; de repente el amor es mucho más complejo.
- ¿Por qué hay artistas españoles que en nuestro país pasan desapercibidos y sin embargo triunfan al otro lado del charco?
-...Son situaciones que se dan. Mira por ejemplo con el grupo La quinta estación, son españoles pero funcionaron primero en México y luego vinieron aquí. Son excepciones.
- ¿Echaban de menos actuar en España?
- Muchísimo. Lo que se vive en directo es muy difícil de transmitir. La canción que escribimos hace dos años no termina hasta que te subes al escenario y escuchas a la gente cantando. Ahí es cuando el ciclo se cierra y es el momento en el que todo cobra sentido. Estamos disfrutando muchísimo de volver a cantar aquí.
