Llega la Navidad, época para compartir las tradiciones en familia y entregarse a la felicidad y la caridad, la paz y el amor, como dice el popular villancico (Stille Nach, heilige Nacht). Esta forma musical y poética que se popularizó a partir del siglo XV sigue constituyendo la banda sonora de las navidades en muchos hogares, aunque en otros se huye de este género y se apuesta por otras canciones más profanas, como los llamados "antivillancicos".

El villancico en latín Adeste Fideles, muy popular en Francia, España, Portugal e Inglaterra desde finales del siglo XVIII, supone "el primer recuerdo musical navideño" para Tomeu Penya. "Lo conocí a la edad de 9 años, cuando estudiaba en La Porciúncula, y con él descubrí lo especial que son las fiestas de Navidad", recuerda el cantautor de Vilafranca. "Una festividad que, durante casi toda mi vida, me ha inspirado familia, hermandad entre las personas", confiesa. En su casa, por estas fechas, el country, las canciones de su añorado Paco de Lucía y la música clásica compiten con los villancicos, un lenguaje que Tomeu conoce y cultiva. Una nadala escrita por su puño y letra es El rei negre (publicada en 1992 en el recopilatorio de Blau 10 anys d´èxits), que cantará el próximo día 13 en el Auditòrium de Palma junto al Cor de Majors de la UIB con motivo del concierto extraordinario Tots per Nadal.

"Los villancicos no son fáciles de escribir -aclara Tomeu-. Se necesita trabajar un sentimiento profundo y pensar sobre todo con los niños. Yo sigo siendo un poco niño, me gusta jugar con lo que sea y bromear continuamente".

La dirección musical de este esperado concierto, el del día 13, que será grabado por IB3 Televisió y publicado por Blau en formato cedé el día 30 -su recaudación se destinará a Cáritas-, correrá a cargo de Joan Company. El músico de Sant Joan, uno de los directores con más presencia en los más importantes circuitos corales de España, creció escuchando el Cant de la Sibil·la en su pueblo natal, una letra y una melodía que le dejaron honda huella y le llevaron a entrar como pueri cantor en la Escolania de la Seu: "Aunque a veces estaba medio dormido, asistir al acto de ses matines en la Seu era una experiencia muy agradable".

Hoy, esa "alegría" la sigue encontrando en la Seu y en el tradicional Concert de Nadal de las corales de la UIB. Estos días previos a esa actuación, Company entrena su oído en su casa escuchando obras como el Oratorio de Navidad de Bach o el El Mesías de Händel y también algunos de los villancicos que se interpretarán, como el original de Marta Elka titulado Ding dong que ejecutará Chenoa junto al Cor de Pares i Mares de la UIB o el Fa un fred de neu, de Jaume Anglada, que interpretará el rockero arropado por las Corals Infantils de Joventuts Musicals de Palma (Cincset i Vuitdeu).

La Navidad es, para Chenoa, uno de los momentos mágicos del año. "Siempre me ha gustado el ambiente navideño", confiesa la cantante, que ultima estos días el lanzamiento de un nuevo disco y se muestra "cómoda y encantada" con el Ding Dong de Marta Elka. "Es todo un honor que cuenten conmigo", subraya.

"Mis primeros recuerdos son los nervios por los regalos, la alegría de fiesta y las luces", agrega Chenoa. Ineludible en este periodo entonar la nostalgia: "Me veo cantando villancicos en los hoteles donde trabajaban mis padres. Yo a veces me subía a cantar".

"La Sibil·la y una pandereta" son los temas centrales de la banda sonora navideña del guitarrista Joan Bibiloni, quien ha elegido Mà al cor para la velada del día 13, tema que tocará con Poema Harmònic, el grupo vocal de la UIB que toma su nombre de una obra para guitarra del compositor mallorquín Francesc Guerau. "Yo en navidades no hago distinciones. No escucho música navideña, y eso que tengo una nadala pendiente de hincarle el diente, de ponerle música. Lleva por título Nadal és y, como el resto de villancicos, es tierno y encantador, con un rey cristiano, moros, samba, bossa, el fuego, referencias al consumo y un niño que se entera de que los Reyes Magos son los padres".

Un villancico atípico, como el Fairytale in New York, una de las canciones preferidas para estas fechas por el cantante del grupo Cap pela Joaquim Domènech. "De villancicos, por Navidad, escucho pocos. Ya hacemos suficientes sobre el escenario", aclara el vocalista, que junto a sus compañeros de banda ha publicado para estas fiestas el disco Happy Christmas, con temas como el citado "antivillancico" de The Pogues, un espléndido Joy To The World que cierra el álbum o el maravilloso Happy Christmas de John Lennon que da título al trabajo, en el que no faltan los clásicos White Christmas o Jingles Bells.

"Fairytale in New York, del grupo punk The Pogues, es un villancico antinavideño que hemos adaptado con Cap pela y que refleja que la Navidad la vive cada uno como puede", afirma sobre esta canción, cantada a dúo por el desdentado Shane MacGowan y la malograda Kirsty MacColl, que narra el encuentro de dos vagabundos alcoholizados en plena Nochebuena.

Fum, fum, fum contituye para Miquel Àngel Sancho, de Blau, el sello que publicará las canciones que se canten en el Auditòrium el día 13, un viaje al pasado: "No sé si me llegó por la radio, en el colegio o por mi entrañable tía Antònia, que me cantaba canciones populares mallorquinas, pero la canción más entrañable en mi infancia fue 25 de desembre... fum, fum, fum", confiesa.

"Como a mucha gente las navidades me agobian un poco. Lo que más valoro es que son una buena excusa para reunirse con la familia. Quizás la música ideal para estas reuniones con la familia y amigos sea una buena balada de Franka Sinatra, no importa que sea un villancico", concluye Miquel Àngel Sancho.