Sobre las cinco de la tarde los bandos de Canamunt y Canavall se encontraron al grito de “A por ellos oé!”, y bajo la banda sonora de Star Wars, se desató la locura.

Tras algunos cánticos de los pregoners, miles de chorros recorrían el aire del centro del Parc de la Mar al ritmo de la música, mientras los combatientes trataban de mojar lo máximo posible a sus adversarios.