La acumulación de suciedad en las joyas es muy común, ya que es un complemento que, en su mayoría, no se despega de nosotros más que para ducharnos o dormir.
Para limpiar las joyas de oro blanco, los expertos recomiendan utilizar remedios caseros, porque no es necesario gastarse dinero en productos específicos.
Jabón de lavavajillas
Para limpiar este material puedes usar jabón de lavavajillas, que resulta de los más efectivos. Lo ideal es sumergir la joya en un recipiente con agua tibia, añadir unas gotas del detergente y dejarla unos minutos.
A continuación, frótala suavemente con un cepillo de cerdas suaves para eliminar toda la suciedad incrustada. Asegúrate de que el cepillo no es duro, ya que podría rallar la joya.
Es importante tener en cuenta que las piedras porosas de las joyas, como las esmeraldas y los corales, pueden perder su brillo con el jabón.
Recuperar el brillo
Las joyas suelen perder el brillo con el tiempo, incluso es posible que la capa de rodio se haya eliminado completamente, dejando un aspecto envejecido. Los anillos y pendientes de oro blanco, entre otros, suelen perder más rápido este baño que les aporta el color.
Para devolverle el brillo original, es necesario volver a ponerle esa capa, por lo que tendrás que llevarlo a un taller de joyería a que le den un baño de rodio, que tiene un precio de aproximadamente 20 euros.
Más trucos de limpieza
De forma periódica tienes en nuestra sección de Decoración los trucos de limpieza que pueden hacer tu vida más sencilla. Se trata de pequeñas ayudas que hemos recopilado en los diferentes foros de internet y en las principales redes sociales en los que más saben de mantener a punto tu hogar te cuentan sus experiencias. Son detalles que pueden hacer tu vida más fácil en el sentido de que gastarás menos tiempo y dinero.
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