La tasa de criminalidad en Balears ha sufrido este primer trimestre del año un leve descenso con respecto al año anterior. Una disminución que se establece en dos décimas y que se sitúa en 67,2 infracciones penales por cada mil habitantes censados en las islas. En esta estadística no se tiene en cuenta la población flotante que visita el archipiélago y que es muy elevada.
Según la valoración que realiza el ministerio de Interior, estas cifras consolidan una tendencia a la baja, dado que este descenso ya se detectó en otros periodos anteriores.
A pesar del descenso estadístico, Balears sigue siendo una de las comunidades autónomas con un mayor índice en la tasa de criminalidad del Estado, algo por encima de la media del resto del país. En estos últimos datos de criminalidad del primer trimestre del año ha tenido una gran repercusión la declaración de la alarma sanitaria, ya que se ha obligado a la población a quedarse en sus domicilios y la presencia de personas en la calle es mucho menor.
Según las cifras que maneja la Delegación del Gobierno, en los últimos dos años el volumen de delincuencia en las islas había sufrido un notable ascenso. Sin embargo, en el último trimestre esta tendencia ha cambiado y se están denunciando muchos menos delitos que en años anteriores.
En el estudio estadístico que maneja el ministerio de Interior también se realiza un análisis de la tipología delictiva. Así, se comprueba que en este primer trimestre han disminuido prácticamente todos los delitos. No se ha producido ningún asesinato, mientras que las tentativas de homicidio han bajado a la mitad.
Las lesiones y riñas tumultuarias han sufrido un descenso de un 6,9%, mientras que los delitos contra la libertad sexual también han bajado en casi un 20 % en Balears. También se ha detectado un descenso considerable en los robos con violencia, o los que se comenten en viviendas o en establecimientos comerciales.
Por el contrario, hay otros delitos que sí han aumentado. El ejemplo es el tráfico de drogas, con un ascenso de casi el 12%, y las sustracciones de vehículos, que han aumentado más de un 20%.
Uno de los datos más preocupantes se centra en las agresiones sexuales con penetración, ya que se han denunciado un 70% más de casos. Así, mientras que el año pasado se investigaron 10 casos, en 2020 ya se han producido 17 agresiones sexuales.
Un dato positivo es que ha aumentado el número de delitos que se han esclarecido, situándolo en el 36,2%, que es el más alto en los últimos diez años. Lo mismo ocurre con la tasa de detenidos e investigados, que es 202 por cada mil infracciones penales.
Por islas, Mallorca registra una tasa de 67,1 infracciones penales por cada mil habitantes. Sin embargo, en Eivissa y Formentera esta tasa es mucho más elevada.
Por municipios de más de 30.000 habitantes, ha sido Calvià la localidad donde se ha producido un mayor descenso de delitos, seguido de Llucmajor. En cambio, en Inca y Marratxí han subido.