Confesión y acuerdo con la fiscalía. Los acusados del asesinato del empresario de Alaró Andreu Coll han llegado a un acuerdo con la Fiscalía.

Andreu Coll hijo ha acordado una condena de 17 años, 6 meses, 1 día, por asesinato con alevosía con el agravante de parentesco. Su compañero Francisco Abas también ha aceptado cumplir 16 años y medio también por asesinato con alevosía.

A la espera del veredicto del jurado, acusaciones y defensas han alcanzado un acuerdo previo al juicio que ha comenzado esta mañana en la Audiencia de Palma con la declaración de los dos jóvenes.

Ambos acusados, que llevan casi dos años en prisión, han admitido ante el jurado que atacaron al hombre con dos armas, un palo con clavos y un martillo, y le golpearon en la cabeza y el cuerpo por sorpresa, simultáneamente "muchas" veces y sin que pudiera defenderse, en su domicilio familiar de Alaró, y después abandonaron el cuerpo en un descampado.

Ante la admisión de los hechos, la Fiscalía y la acusación particular que formula una hermana del empresario asesinado y tía de uno de los acusados, han rebajado la petición de condena, que en un principio era de 25 años para el hijo del fallecido y de 22,5 años de prisión para su amigo.

El cadáver de Andreu Coll, un empresario de Alaró, fue encontrado en un camino rural de Bunyola el 30 de junio de 2013.

Días después fueron detenidos su hijo, entonces de 19 años, y un amigo suyo como presuntos autores del crimen y acabarían confesando su autoría. El asesinato se produjo en la vivienda, donde le habrían asestado numerosos golpes con un palo y un martillo. Tras el asesinato, trasladaron el cuerpo en un vehículo hasta el camino dels Cocons de Bunyola, donde fue hallado a la mañana siguiente.

Andreu Coll hijo y su amigo Francisco Abas fueron detenidos pocas horas después de funeral por el empresario y acabaron por confesar el crimen. La noche antes del asesinato ya lo habían intentado drogando a la víctima con un somnífero, aunque desistieron en su intento.