Virgilio J.M. duerme ya entre rejas. El histórico carterista con 75 antecedentes policiales a sus espaldas, la mayoría por hurtos, ingresó el pasado lunes por la noche en prisión por orden judicial por atracar a una turista el día anterior en el Parc de les Estacions, en Palma. El delincuente reincidente, de 59 años de edad, está imputado por un delito de robo con violencia, ya que supuestamente sustrajo a la víctima una cartera con más de 250 euros y una pulsera y, al verse descubierto, atacó a la mujer y la arrojó contra el suelo.

La Policía Nacional detuvo al hombre, muy conocido en círculos policiales al llevar cuatro décadas desvalijando a ciudadanos en Palma, s´Arenal y otros puntos de la isla, el pasado domingo por la tarde. El sospechoso fue sorprendido agazapado entre dos coches cuando trataba de esconderse de los agentes. Los investigadores encontraron muy cerca de allí el billetero con el dinero, documentación de la perjudicada y su pulsera de cordón.

El lunes por la tarde, el famoso ´descuidero´ de Palma fue trasladado a los juzgados de Vía Alemania. El arrestado negó de forma rotunda los cargos. Virgilio insistió en que no había atracado a la turista ni le había propinado un empujón. De nada le sirvió su versión autoexculpatoria ante la magistrada del juzgado de instrucción número 1 de Palma, en funciones de guardia, porque, tras prestar declaración, la jueza ordenó para él la prisión provisional sin fianza.

No es la primera vez que Virgilio es encarcelado. En los últimos años, ha pasado pequeñas temporadas entre rejas, pero al final siempre acaba saliendo en libertad. El delincuente está especializado en cometer hurtos al descuido que no implican su entrada en prisión al tratarse de faltas o delitos menores. Según recuerdan veteranos policías, el hombre es un carterista profesional que en los años 80 ya actuaba en el centro de la ciudad.

Hace dos años, un juez de Palma le impuso una orden de alejamiento de cuatro líneas de autobús de la ciudad y el pasado agosto otro magistrado le prohibió acercarse a toda la Playa de Palma y a s´Arenal de Llucmajor, sus lugares preferidos para robar. Este verano fue arrestado por sustraer el bolso a una turista en la playa y de nuevo negó estar implicado en los hechos. Pese a ello, en algún juicio ha llegado a reconocer que es "ratero". El domingo forcejeó con una víctima, que acabó en el suelo. Por ello, fue encarcelado.