La Guardia Civil recuperó ayer sobre las diez de la mañana el cadáver de un joven que flotaba en el mar enfrente de la pequeña playa conocida como el racó de ses Dones, enfrente de la cueva del mismo nombre, en la zona de es Soto de Eivissa. El cuerpo no presentaba signos de violencia y todo apunta que murió por ahogamiento. Habrá que esperar para confirmarlo al resultado de la autopsia, que se realizará probablemente hoy o mañana.

El joven estaba indocumentado, ya que solo llevaba puesto un bañador. Un portavoz de la Guardia Civil explicó que se trata de un hombre de raza blanca, por sus características posiblemente originario del este de Europa y que rondaría los 25 años de edad. Añadió que probablemente llevaba muerto entre dos y tres horas.

Los agentes del equipo de la Policía Judicial, que se ha hecho cargo de la investigación, indagaron en viviendas y establecimientos turísticos próximos a es Soto para ver si alguien conocía al fallecido, que también pudo zambullirse o caer al agua desde un barco. A la hora del cierre de esta edición, nadie había preguntado por el fallecido, por lo que por el momento se desconoce su identidad.

El aviso lo dieron personas que se encontraban en la zona a primera hora de la mañana. Hasta el lugar se desplazaron patrullas de la Policía Local de Eivissa. Finalmente, como el cuerpo se encontraba en el mar, se dio aviso a la Guardia Civil, que movilizó una lancha de los Grupos Especiales de Actividades Subacuáticas (GEAS).

Los submarinistas recuperaron el cadáver y lo trasladaron a tierra, desde donde lo llevaron al tanatorio. En las próximas horas se le practicará la autopsia.