Un individuo de 35 años de edad se confesó ayer culpable de un delito de tráfico de drogas y otro de tenencia ilícita de armas. El sospechoso aceptó cumplir cuatro años de prisión, si bien inicialmente la fiscalía le solicitaba ocho años de reclusión por estos delitos. Un pacto entre la defensa y la acusación evitó que el juicio llegara a celebrarse.

Los hechos ocurrieron hace cuatro años. La Guardia Civil y la Policía Local de Sóller montaron un dispositivo de vigilancia. Los agentes interceptaron al sospechoso cuando portaba encima 90 gramos de cocaína distribuidos para su venta.

Ante esta situación se solicitó el correspondiente mandamiento judicial para registrar el domicilio del detenido. En el inmueble se intervino más droga. En concreto, el hombre guardaba cuatro bolsas con un total de 360 gramos de cocaína. También se descubrió que el sospechoso guardaba en su casa una pistola semiautomática y 55 balas.