La Policía Nacional ha detenido en Palma a cinco personas como presuntos autores de más de cuarenta robos perpetrados en trasteros y zonas comunitarias de inmuebles, en dos operaciones policiales distintas en las que se han recuperado numerosos objetos sustraídos.
Las detenciones se han producido esta semana, cuando por un lado han sido arrestadas cuatro personas de un mismo grupo familiar, y por otro un hombre que actuaba solo, ha informado la Jefatura Superior de Policía de Baleares en un comunicado.
En ambos casos, las detenciones suponen la culminación de investigaciones que realizaban los agentes de la Comisaría de Distrito Centro a causa de los numerosos robos con fuerza que desde hace meses se habían detectado en trasteros y en zonas comunitarias de inmuebles.
La primera de las actuaciones se inició hace aproximadamente dos meses, después de que en enero se detectara un incremento de sustracciones en interior de portales y zonas comunes de fincas ubicadas en el casco histórico de Palma.
El modus operandi era similar en todos los casos, en los que los ladrones accedían a la finca abriendo el portal con un engaño y, una vez dentro, utilizaban una llave maestra para abrir puertas comunitarias y de trasteros, apoderándose de los efectos que encontraran en su interior.
Tras casi dos meses de investigación, las pesquisas se centraron en cuatro integrantes de una misma familia, a uno de los cuales se le atribuye la autoría de los robos mientras los otros tres se encargaban de dar salida a los efectos sustraídos.
Los cuatro han sido detenidos y en la operación se ha logrado esclarecer el robo de más de 20 bicicletas de alta gama, ordenadores portátiles, cámaras de fotografía, teléfonos móviles, una guitarra española, una minicadena, tres televisores, varios objetos de decoración y menaje, varias impresoras láser, sintonizadores de TDT, herramientas, electrodomésticos, ropa, maletas de viaje y unos esquís.
La segunda actuación culminó con la detención de un único ladrón, cogido "in fraganti" tras cometer un robo. Se trata de un español con numerosos antecedentes policiales que se dedicaba a robar en trasteros de aparcamientos de la calle Aragón a la altura del Rafal Nou y a quien se le imputan 18 robos con fuerza.
