Un joven de 26 años falleció ayer al caer de un tercer piso en la urbanización Puig de Ros, en Llucmajor. Parece ser que la víctima intentaba acceder a su domicilio desde el balcón de un vecino, ya que había se olvidado las llaves, y cuando cruzaba entre las dos terrazas perdió el equilibrio y se precipitó al vacío. Al lugar acudieron varias dotaciones del 061, cuyos efectivos no pudieron más que certificar su defunción, debido a las gravísimas lesiones que sufrió en la caída. La Guardia Civil abrió una investigación para aclarar los hechos y el cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal para practicarle la autopsia.

Los hechos ocurrieron poco antes de las cinco de la tarde en un edificio de viviendas de la calle de la Falsia, en la urbanización Puig de Ros, en Llucmajor, explicaron fuentes sanitarias y policiales. Varias llamadas alertaron a los servicios de emergencias de un hombre se había precipitado desde el tercer piso de la finca. Al lugar se desplazaron varias patrullas de la Policía Local y la Guardia Civil, así como una UVI móvil del 061. Los efectivos sanitarios trataron de reanimar a la víctima, pero todos los esfuerzos fueron en vano y el hombre falleció allí mismo. El óbito fue comunicado al juzgado de guardia.

La Guardia Civil inició las pesquisas para esclarecer lo ocurrido. Los investigadores identificaron a la víctima, un joven de 26 años, y averiguaron que había acudido al domicilio para enseñar la vivienda, propiedad de sus padres, a unas personas interesadas en comprarla. Sin embargo, había olvidado las llaves del inmueble, por lo que pidió permiso a un vecino para intentar entrar a través de un balcón. El joven se habría precipitado al vacío cuando pasaba de una terraza a otra. Los agentes realizaron una detenida inspección ocular del lugar y descartaron la intervención de otras personas en los hechos.