La fiscalía reclama sendas penas de cinco años de cárcel para dos jóvenes marroquíes como presuntos autores de una oleada de robos en Sóller, Bunyola y Esporles. Los acusados, que ayer negaron los hechos durante el juicio, supuestamente actuaron en cuatro domicilios y dos comercios en apenas dos semanas a principios de año, en algunos de ellos con los moradores dentro, tras forzar las puertas y ventanas.
Los dos sospechosos, que fueron detenidos con varios de los efectos sustraídos, negaron ayer los hechos durante la vista celebrada en un juzgado de lo penal de Palma, y según fuentes jurídicas, se culparon el uno al otro. La sala escuchó también a las seis víctimas. Uno de ellos, vecino de Sóller, explicó que entraron en su vivienda en la madrugada del 21 de enero, cuando él y su mujer estaban durmiendo. Los ladrones se llevaron diversas joyas, unos 150 euros en efectivo y un GPS. También declaró la propietaria de una vivienda de Bunyola, de la que se llevaron el 8 de febrero un cámara de fotos. Esa misma noche se cometió otro robo en una pizzería de la localidad, cuyo dueño explicó que le sustrajeron la caja registradora con 150 euros. Además, la dueña de un estanco de Esporles contó cómo sorprendió a dos personas intentando forzar la verja de entrada el 2 de febrero.
