Se equivocó de víctima. Un hombre fue juzgado ayer en Palma por intentar atracar a un pasajero de un autobús de la EMT que iba sentado en la parte trasera del vehículo manipulando su iPhone a la altura de la calle Aragón. Presuntamente le amenazó con pegarle una paliza si no le entregaba su valioso teléfono móvil. Y no reparó que en su pantalón se leía la inscripción CNP. Así, que a la víctima no le quedó otra que identicarse como policía nacional fuera de servicio. Entonces, el asaltante se apresuró a decir que aquello era una broma y bajó del autobús. Pero el perjudicado le siguió y le detuvo. El sospechoso le dijo que le iba a "rajar".

El asalto se produjo el pasado 22 de diciembre por la noche en un autobús de la línea 3 en Palma. El acusado alegó ayer que iba muy drogado y que iba a intercambiar juegos con la víctima. Según indicó, fue amenazado. La fiscal pidió 15 meses de cárcel para él.