­La actuación de los técnicos de mantenimiento de Spanair imputados por el accidente de agosto de 2008, en el que murieron 154 personas en Barajas (Madrid), fue correcta y no puso en riesgo el avión, según el nuevo informe pericial remitido al juez que investiga las causas del siniestro.

El informe de más de cien páginas ha sido realizado por un técnico de mantenimiento de aeronaves y dos ingenieros técnicos aeronáuticos a petición de la defensa de los profesionales imputados del área de Mantenimiento de Spanair. En él se concluye que "no existe relación entre las acciones de los profesionales de mantenimiento de la compañía Spanair y el accidente del avión", y que sus acciones "no tuvieron ninguna incidencia que pudieran poner en riesgo la operación segura de la aeronave".

Los peritos dicen en el informe que las labores de mantenimiento antes del accidente "cumplieron con todos los procedimientos que regulan su actividad", es decir que hicieron lo fijado en los manuales MEL (de equipo mínimo) y MOE (de organización de mantenimiento aeronáutico), con las que Spanair cumple las regulaciones en vigor.

Estos expertos sostienen que las actuaciones relacionadas con el vuelo JK5022 se hicieron por "un conjunto de profesionales del área de mantenimiento aeronáutico con alta experiencia en el mantenimiento y despacho de aeronaves en línea".

El titular del juzgado de instrucción número 11 de Madrid, Juan Javier Pérez, mantiene imputados a dos técnicos de mantenimiento de Spanair y a tres directivos de la compañía por los delitos de homicidio y lesiones imprudentes.