­Un hombre fue juzgado ayer en Palma por atracar a un ciudadano en plena calle a principios de año y luego agredir con patadas y puñetazos al policía que le detuvo. El sospechoso, que cuenta con numerosos antecedentes y actualmente se encuentra en prisión, negó los cargos y solo admitió que rompió un frasco de colonia en la Jefatura y amenazó con autolesionarse y cortarse en el cuello con un cristal.

La fiscal solicitó una condena de cuatro años de cárcel para el imputado al considerarle responsable de un delito de robo con violencia y otro de atentado. La pena se sustituiría por la expulsión de España durante 10 años al ser un extranjero en situación irregular, según propuso la acusación pública. Por su parte, el letrado de la defensa, David Burgos, pidió la absolución del hombre o la pena mínima por los dos delitos o por una falta de hurto.

Los hechos ocurrieron el pasado 15 de enero en las proximidades de las avenidas de Palma con la calle Lluís Martí. El perjudicado explicó que cuando el sospechoso le abrazó, se apoderó de su cartera y el tabaco. Luego, fue increpado y amenazado. Por suerte, pudo recuperar los efectos y avisar al 112. El acusado dijo que solo intentó coger el paquete de tabaco y negó haberse enfrentado a los agentes de la Policía Nacional.