Dos personas fueron detenidas ayer por agentes de Vigilancia Aduanera tras incautarles un alijo de más de dos toneladas de hachís localizado en una autocaravana en el Port d'Alcúdia y en una finca de Son Servera.

La primera detención se llevó a cabo a primera hora de la mañana. Un ciudadano francés identificado como J.C. fue arrestado cuando se disponía a embarcar en el ferry que cubre el trayecto entre el Port d'Alcúdia y Barcelona con una autocaravana en la que transportaba más de una tonelada de hachís. Los investigadores prosiguieron las gestiones por la tarde ante las sospechas de que el detenido pudiera guardar más droga en su domicilio.

A última hora de la tarde, las pistas les llevaron a una finca de Son Servera, propiedad del primer detenido. Los agentes solicitaron una orden de entrada y registro a la autoridad judicial. Tras la autorización, registraron la vivienda y localizaron un segundo alijo de la misma sustancia estupefaciente. La droga estaba distribuida en 43 fardos de un peso aproximado de entre 20 y 25 kilos cada uno.

Los investigadores se incautaron del hachís y detuvieron a una segunda persona supuestamente relacionada con el narcotráfico.

Investigación policial

Según informaron fuentes de la Delegación en Balears de la Agencia Tributaria, sus agentes adscritos al Área Operativa de Vigilancia Aduanera llevaban meses investigando las presuntas actividades ilegales del primer arrestado, un ciudadano francés que reside en una finca en Mallorca. Estas investigaciones se realizaron en colaboración con las autoridades fiscales francesas.

Las diligencias llevaron a los agentes a sospechar que el francés podría estar implicado en una organización que se dedicaría a trasladar hachís desde el norte de África a Francia, y que utilizaría Mallorca como puente.

El hombre investigado supuestamente almacenaba grandes cantidades de droga en su finca de Son Servera, y efectuaba viajes periódicos a la península para desde allí trasladar por carretera los alijos.

Ante los indicios que apuntaban a que el sospechoso preparaba el traslado de una gran cantidad de droga, los agentes establecieron controles en los puertos comerciales de la isla. Este operativo permitió localizar, a primera hora de la mañana de ayer, al hombre que, al volante de una autocaravana, se disponía a embarcar en el ferry que une el Port d'Alcúdia con la capital catalana.

Los agentes de Aduanas interceptaron el vehículo y realizaron un registro en su interior. No fue necesario buscar mucho porque la autocaravana estaba atestada con una cincuentena de fardos que contenían tabletas de hachís. Un pesaje aproximado arrojó una cantidad de 1.050 kilos de droga.

Sin embargo, los agentes estaban convencidos de que en la finca del detenido podría haber más droga. Así pues, se trasladaron a una finca de Son Servera para proseguir con las gestiones. El registro fue positivo y dio como resultado otra incautación de unos 1.075 kilos de hachís y la detención de una segunda persona.

Esta operación se produce apenas unos días después de que el Grupo de Investigación Fiscal y Antidroga (GIFA) de la Guardia Civil se incautara de otra tonelada de hachís en dos autocaravanas ocultas en un almacén de Sineu.

En esta intervención fue detenida persona, Saturnino M.S., de 44 años, con antecedentes policiales por tráfico de drogas. El acusado ingresó en la prisión de Palma. La investigación empezó en mayo, cuando los agentes descubrieron que había una red de importación que distribuía droga en Mallorca. Fuentes policiales negaron ayer que existieran vínculos entre las dos organizaciones.