De la "gran desconocida" a espacio donde 2,5 millones de personas recuperan el poder de soñar. El turismo es desde hace años uno de los principales motores económicos de Extremadura. Una maquinaria muy bien engrasada que ya ha recuperado los niveles de visitantes, ocupación y pernoctaciones prepandémicos. Los objetivos que se marca la comunidad autónoma son muy ambiciosos al respecto, pero no inalcanzables. Pretende superar los 2,5 millones de viajeros y las 5,5 millones de pernoctaciones en el año 2025, además de generar 30.000 empleos directos. En definitiva, que represente el 8% del Producto Interior Bruto Anual.
EL II Plan de Turismo de Extremadura que pretende encaminar al sector hasta 2025 tiene un presupuesto de 190 millones de euros
Todas estas aspiraciones están recogidas en la Estrategia de Turismo Sostenible de Extremadura 2030. II Plan de Turismo de Extremadura 2021-2023, que cuenta con el respaldo de los empresarios y los sindicatos. El presupuesto de este II Plan de Turismo de Extremadura y que pretende encaminar al sector hasta 2025 es de 190 millones de euros que se reparten de la siguiente manera: 54 millones en 2021; 35 millones en 2022; 46 millones en 2023 y 55 millones en 2024 y 2025. Grosso modo, la estrategia de este plan busca la venta del destino, generar un entorno innovador e inteligente, crear experiencias positivas y avanzar en el desarrollo sostenible a través de 19 objetivos y 66 proyectos.
El interés que despierta Extremadura como destino está patente en los datos de la última Feria Internacional del Turismo (Fitur) donde su estand fue escenario en 2022 de 407 reuniones con touroperadores. También es significativa la Feria Internacional de Ornitología FIO 2022, que acogió en Monfragüe 500 reuniones. Extremadura ha participado recientemente en cinco grandes ferias y realizado viajes profesionales a los mercados de Alemania, Austria, Reino Unido, Portugal y Francia.
Aunque todavía no están cerradas las cifras de este 2022, sí se pueden dar algunas pinceladas del sector turístico extremeño, que el pasado mes de julio alcanzó los 28.383 afiliados a la Seguridad Social (cifra récord) y 7.981 autónomos según los datos de Turespaña, una variación de 2.168 afiliados más que en 2021. El pasado mes de julio fue el mejor mes de toda la serie histórica de los últimos 30 años. La recuperación del sector tras la pandemia ha sido prácticamente total. Extremadura se situó en la última Semana Santa a la cabeza del país en cuanto a datos de ocupación en turismo rural, con un 73%, por encima de la media nacional. Más números para el optimismo: los establecimientos extrahoteleros de Extremadura (apartamentos, campings, alojamientos rurales y albergues) sumaban en enero 32.231 pernoctaciones, un incremento del 336,38 por ciento con respecto al mismo mes de 2021. El turismo rural aumentó interanualmente en un 328% más de viajeros, con una estancia media de 2,22 días en Extremadura. Finalmente, el número de empresas y actividades turísticas que se inscribieron en 2021 en Extremadura fueron 562, una cifra nada desdeñable.
La recuperación del sector tras la pandemia ha sido prácticamente total con datos de ocupación sorprendentes
Actualmente, la región está inmersa en una campaña de promoción específica para el otoño-invierno denominada ‘Recupera el poder de soñar’ y que da continuidad a ‘Extremadura. Todo lo que imagines, donde no te lo imaginas’, pero con un nuevo enfoque, en el que se promociona el turismo regional a través de historias y sentimientos.
La gran novedad de Extremadura desde el punto de vista turístico en 2022 ha sido la concesión de ocho Banderas Azules a sus maravillosas playas de interior, lo que la convierte en la región con más distinciones en playas continentales del país: Orellana la Vieja, Cheles, Alange, Campanario, Los Calicantos (Casas de Don Pedro), Isla del Zújar (Castuera), El Espolón-Peloche (Herrera del Duque) y Talarrubias-Puerto Peña (Talarrubias). La excelencia de sus aguas y la calidad de los servicios a los bañistas les han hecho acreedoras de estos reconocimientos. Extremadura cuenta con 53 zonas de baño con vigilancia sanitaria que se suma a una oferta cultural y gastronómica insuperable. En la guía ‘Extremadura es agua’ se mencionan al menos 17 paisajes con gargantas, cascadas, meandros como el Cerro Masatrigo en el embalse de La Serena. Todo ello se complementa con balnearios como los de Baños de Montemayor o Alange.
La gran novedad de este año ha sido la concesión de ocho Banderas Azules a las maravillosas playas de interior extremeñas
La oferta turística extremeña es inmensa, aunque una primera aproximación puede hacerse a través de sus espacios Patrimonio de la Humanidad. En total se trata de seis enclaves con el sello de la Unesco (conjunto monumental de Cáceres, conjunto arqueológico de Mérida, Monasterio Real de Santa María de Guadalupe, Reserva de la Biosfera y Parque Nacional de Monfragüe, Reserva de la Biosfera Transfronteriza Tajo Internacional y Geoparque Mundial Villuercas-Ibores-Jara). A estos hay que añadir un Real Sitio (Monasterio de San Jerónimo de Yuste, Patrimonio Nacional y Europeo).
Pasear por la Ciudad Monumental de Cáceres se sumergirse en la historia, recorriendo sus plazas renacentistas como las de San Jorge o Las Veletas, disfrutando de la más alta gastronomía internacional con Atrio o desembocar tras pasar por el abocinado Arco de la Estrella en una plaza Mayor de impresionantes dimensiones. Recientemente, a la oferta se ha sumado el nuevo Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear, con el que Cáceres se ha posicionado en el décimo puesto del ranking de las ciudades con mayor calidad e innovación en su oferta cultural en 2021, que elabora el Observatorio de la Cultura.
Extremadura cuenta con seis estupendos enclaves con el sello Unesco de Patrimonio de la Humanidad y un real sitio
Este año hay una ciudad protagonista. Plasencia, ciudad conocida como la ‘perla’ del Jerte, vive uno de sus momentos más dulces desde el punto de vista turístico y cultural. La exposición ‘Transitus’ de Las Edades del Hombre en la catedral placentina muestra hasta finales de año la riqueza patrimonial y cultural de Extremadura a través de una selección de obras de arte procedentes en su mayoría de la comunidad autónoma.
