¿Hay algo mejor que disfrutar de una buena comida o cóctel? Sí, hacerlo con las mejores vistas de la ciudad. Éste es el servicio que se ha puesto de moda entre los hoteles más lujosos y emblemáticos de Palma. Una nueva oferta para el público local que es posible disfrutar a precios asequibles (y sin ser cliente del establecimiento). Para muchos residentes, esta posibilidad aún es desconocida, pero por lo menos ocho hoteles del centro de Palma están ofreciendo comer o tomar algo desde las alturas.
Uno de ellos es el OPIO Bar & Restaurant del Puro Hotel & Spa, un establecimiento de diseño ubicado en un edificio del siglo XVIII de La Lonja, en el casco antiguo. El bar OPIO está abierto al público durante todo el día y cuenta con dos patios interiores, una terraza y una torre con excelentes vistas donde comer algo o tomar una copa, aseguran desde el hotel. El menú incluye una fusión de comida mediterránea y asiática elaborada con productos frescos de temporada y la actuación de un DJ durante todos los fines de semana.
También destaca el Gastrobar Saratoga, situado en el Paseo de Mallorca. El restaurante es famoso por su amplia carta de cocina de autor elaborada con productos frescos, así como sus cócteles y su especialidad en vinos. "Actualmente, el hotel es famoso por las actuaciones de jazz en directo que ofrece cada jueves, viernes y sábado en el Blue Jazz Club", señalan desde la recepción del hotel. El club de jazz está situado en la última planta del edificio, donde también hay servicio de bar-coctelería con excelentes vistas a la bahía de Palma y al casco antiguo. La entrada para las actuaciones de jazz en directo son gratuitas. Los jueves son a partir de las 21.45 y los viernes y sábados a partir de las 22.45. El hotel está abierto al público cada día de 10.30 hasta las 00.00, y los viernes y sábados hasta las 2.00 de la mañana.
El Santa Clara Urban Hotel & Spa, cuya entrada se encuentra en la calle San Alonso, cerca de Los Baños Árabes y La Catedral, se une a este servicio y abre su terraza al público durante las tardes-noches. Se fundó en 2008 y su estilo entremezcla lo moderno con las características originales del edificio. El bar-restaurante, que se encuentra en la 8ª planta del hotel, es un salón abierto a la terraza donde se puede disfrutar de las vistas mientras se prueba un plato típico de cocina mallorquina elaborado con productos locales y también de propia elaboración. Además, también se puede visitar la terraza-ático a partir de las 19.00, donde además de copas pinchan djs los jueves y los viernes.
Ubicado en el Born se encuentra el hotel de cinco estrellas Boutique Hotel Can Alomar, erigido en una antigua casa señorial de estilo gótico del siglo XV catalogada como edificio de interés histórico, artístico y arquitectónico, y de gran valor patrimonial. Su restaurante, De Tokio a Lima, está dotado con dos terrazas y vistas al emblemático paseo, abierto durante el mediodía y la noche. La carta, además de cócteles y bebidas, consiste en una fusión de comida japonesa-peruana-mediterránea de alta calidad, apunta uno de los trabajadores de la cocina. El hotel también cuenta con una terraza solarium y un mirador con excelentes vistas al emblemático paseo del Born.
El Paseo Marítimo, La Catedral o el Castell de Bellver son algunos de los lugares más emblemáticos de la ciudad que pueden verse desde la terraza del Hotel Almudaina, situado en Jaime III y recientemente renovado. Los servicios de restaurante y bar están a disposición del público durante la tarde-noche, y dispone de un solarium, un bar interior con terraza y un restaurante donde disfrutar de una gran variedad de platos y copas mientras se observa la ciudad desde la altura.
El Bar Lounge del Hotel Tres de Palma, ubicado junto a La Lonja, también es uno de los mejores valorados en este servicio. El hotel, de diseño moderno fusionado con la esencia del palacio medieval original, está abierto al público de las 11.00 hasta la medianoche, y dispone de una terraza desde donde se ve toda la ciudad y la bahía, y donde deleitarse con sus sandwiches típicos escandinavos de carne, gambas, etc., así como de su variada carta de cócteles y bebidas.
La séptima copa corresponde al Boutique Hotel Calatrava, cuya entrada principal se encuentra en la plaza Llorenç Villalonga. El Calatrava Gastro-Gourmet se localiza en la planta baja del hotel y cuenta con una terraza exterior, con vistas al Parc de la Mar y al Mediterráneo desde donde se puede disfrutar de "comida casera" mallorquina y española con productos de temporada de alta calidad, señalan desde la cocina del hotel. Se encuentra abierto al público todos los días de 12.30 a 23.00 y cuenta con una pequeña tienda donde se pueden adquirir los productos típicos de la isla.
Por último pero no menos importante, el Nakar Hotel, situado en el histórico edifico Nacar en la Avenida de Jaime III, también tiene unas excelentes vistas al mar y al resto de la ciudad, y servicios de coctelería a partir de las 20.00 horas en su terraza. La propiedad, gestionada por la familia Ramis, fue reconvertida a principios de este año en un hotel de cuatro estrellas plus después de un año de remodelación y forma parte de la selecta red internacional Design Hotels. El establecimiento, además de la terraza situada en el ático del hotel, también cuenta con un bar-restaurante de diseño una planta más abajo, del conocido chef mallorquín Miquel Calent, donde disfrutar de cocina artesanal elaborada con productos locales, de temporada y de producción sostenible. El director del hotel, Miguel Barceló, añade que a pesar de no haberlo anunciado, los jueves y viernes a partir de las 20.00 horas el establecimiento ha empezado a animar el ambiente de la terraza con la música del Dj Tony Jiménez, que pincha una selección de música moderna, minimalista y bailable. También apunta que mucha gente local ya visita la terraza y que se ha tenido que empezar a restringir el acceso para mantener el buen ambiente y la excelencia del servicio.