La mayoría de melómanos que visitan la Filarmónica de Szczecin (Polonia) no saben que pisan suelo mallorquín. El edificio, recién premiado con el prestigioso Mies van der Rohe, está construido con baldosas de la empresa isleña Huguet. Desde los talleres de Campos se han fabricado dos modelos para el suelo, otro para las paredes y las escaleras así como piezas de mobiliario y los lavabos. Explica el responsable de la fábrica de Campos, Biel Huguet, que "todo es hidráulico, un material con el que los arquitectos ganadores del proyecto nunca habían trabajado", refiere. A partir de los conocimientos del empresario sobre los materiales tradicionales de la isla, Alberto Veiga y Fabrizio Barozzi empezaron a proyectar. "Para una zona, diseñamos una baldosa con un dibujo y, para otra, un prototipo con un pentágono", señala el mallorquín. Además de estas piezas blancas, tuvieron que buscar una solución para la escalera y diseñar los lavabos, "unas piezas de cemento pulido". Los muebles de marmolina que fabricaron son los del guardarropa, el punto de información y la tienda.
Uno de los aciertos de Huguet, que está abriendo una interesante línea de colaboración con proyectos arquitectónicos de autor, es conseguir una armónica evolución de los diseños tradicionales mallorquines hacia líneas contemporáneas gracias al I+D+i.
Uno de los retos del proyecto polaco era ajustarse a un presupuesto modesto. "Es un edificio muy sencillo y a la vez con todos los detalles cuidados al máximo", refiere Huguet, quien se define como un artesano "que no vende productos estándar, sino que atiende a las necesidades de cada cliente".
El empresario de Campos espera poder participar en los próximos proyectos de los arquitectos Veiga y Barozzi, que acaban de ganar dos concursos internacionales en Suiza para proyectar una escuela de música y danza en Zúrich y el Museo de Bellas Artes de Laussane.
Huguet comenta que los arquitectos de la Filarmónica de Szczesin, establecidos en Barcelona, se pusieron en contacto con él a través de un amigo en común que les habló del trabajo realizado por el mallorquín en el Edificio Fórum de Herzog & de Meuron de la Ciudad Condal. "Les enseñamos lo que habíamos hecho allí y les gustó", agrega.
La empresa de Campos va a continuar colaborando con arquitectos de renombre y sus proyectos de largo aliento. Ya lo hicieron con Carme Pinós, por ejemplo, y en estos momentos están diseñando una colección con Elías Torres y en breve habrá otra con Lluís Clotet o la diseñadora Sybilla. "También estamos trabajando con el arquitecto mallorquín Jaume Mayol, uno de los pocos isleños que gana concursos internacionales", señala Huguet, al frente de una empresa familiar con 18 trabajadores y 82 años de historia a sus espaldas.
El Premio de Arquitectura Contemporánea de la Unión Europea-Premio Mies van der Rohe, dotado con 60.000 euros, está considerado como el más prestigioso del campo de la arquitectura en Europa. La Filarmónica de Szczecin está inspirada en la arquitectura tradicional polaca y tiene a la vez una imagen innovadora. Mallorca también le ha puesto su sello.
