Merche Zaforteza empezó a decorar tazas por casualidad. Fue el pasado mes de septiembre. Esta licenciada en Publicidad, Marketing y Relaciones Públicas acabó la universidad y como muchos jóvenes, no encontraba trabajo. Su novio fue contratado por una empresa y le pidió a ella que le hiciera una taza para llevar a su nueva ocupación. Este hecho y la ayuda de las redes sociales han permitido que haya vendido más de 600 tazas personalizadas en menos de seis meses.

Un rotulador negro y una taza de color blanco bastan para dar vida a estas cerámicas pintadas a mano por la artesana. "Yo quería pintar tazas. Siempre he hecho manualidades. Nunca pensé que acabaría siendo mi trabajo. Colgué la foto de mi primera taza en Facebook y la gente comenzó a animarme a que siguiera haciéndolas porque decían que eran bonitas y decidí tirar adelante".

Según Zaforteza, la receta para diseñar estos objetos es fácil. "Lo único que se necesita es paciencia y tiempo, además de tazas y pintura especial para cerámica. Una hora y media de horno a 160 grados y la cerámica está lista para utilizarla".

San Valentín, el día del padre o un cumpleaños. Un artículo elegante y de diseño que se puede regalar en cualquier celebración por 10 euros. El método para conseguir una es sencillo. Se pueden hacer pedidos a través de la página de Facebook Merchezafor o ir a comprarlas a los puntos de venta localizados en las tiendas Mavuela´s, Entre telas, Guindalia o Ciandel.

Esta artista cree que en la situación actual, las nuevas generaciones tienen que ser valientes. "Si hubiera encontrado trabajo al acabar la carrera no habría empezado a pintar las tazas. Quiero animar a todos los jóvenes como yo a que sean emprendedores, que si tienen una buena idea la lleven a cabo".

Los modelos que más vende tienen como eslogan frases recurrentes como Te quiero mucho como la trucha al trucho y Te quiero hasta el infinito y vuelta aunque la taza en la que aparece dibujada Audrey Hepburn en Desayuno con diamantes también tiene mucho éxito.

Con una estética muy similar a Mr. Wonderful, que tan de moda está entre los más jóvenes, los mensajes y las imágenes que pinta crean una combinación perfecta. "Me adapto a las exigencias de cada uno. La gente me dice que quiere poner en la taza y qué imágenes les gustaría que salíeran".

Más productos

El trabajo de Merche Zaforteza no solo se reduce a dibujar tazas. La artesana también ofrece la posibilidad de decorar teteras, tacitas, tazones, take aways -para llevar-, tea for one y bols. "La línea de modelos está centrada en diferentes tipos de recipientes. Me gustaría ampliar la variedad de productos, pero aún no hay nada definido".

Esta autónoma no descarta contratar a trabajadores si sigue aumentando la demanda de tazas personalizadas. "Ahora puedo trabajar pero no tengo tiempo para nada más. Estoy pensando en si hablar con alguien para que me eche una mano en el negocio".

Un ejemplo de superación e ingenio que no lo ha tenido todo fácil. "Para mis primeros pedidos hice un encargo de tazas a China y nunca llegó". La perseverancia ha conducido a la diseñadora al éxito.