Adrián Martínez: Scenes

Galería Ferran Cano. Calle Forn de la Glòria, 12 (Palma). Hasta el 7 de diciembre.

Lewis Carroll mostraba a su personaje de Alicia en un espacio inamovible, pero sólo en apariencia: "Puedes llegar a cualquier parte, siempre que andes lo suficiente". Adrián Martínez Marí (Eivisssa, 1984) nos ofrece en la galería Ferran Cano una escenografía que nos habla de cosas elementales, a través de posibilidades rítmicas en la búsqueda de la esencialidad. Nacido en Eivissa, Adrián vive y trabaja en Tenerife, las islas son para él un lugar ideal para imaginar utopías. Dicen que el aislamiento hace sentirte el centro de todo lo que te rodea, sin los obstáculos de la tierra firme, puede que sea cierto. El artista trabaja con varios soportes y presenta dibujos con grafito sobre papel e instalaciones site-specific compuestas a partir de hilos, alfileres y luz, con la que consigue lograr un efecto teatral. A Adrián Martínez le preocupa la materia sutil y las relaciones que establece con el espacio, con intervenciones discretas, contenidas, delicadas€, un trabajo de mínimos, con efectos máximos, porque ofrece al espectador la posibilidad de entrar en su escenografía y formar parte de ella. El dibujo le sirve como dispositivo expresivo capaz de enunciar el sentido de la pausa desplegado ante nuestra mirada. El joven creador hace visible un silencio inexcusable que impone lecturas transversales y que convierten su trabajo en más significativo, también ponen en evidencia la coherencia de su proyecto. Los dibujos muestran sensuales gamas de negro que crean unas estructuras de profundas resonancias poéticas y sensual belleza. El dibujo se convierte en panorama, una invocación a la circularidad de la vida, una idea que Nietzsche lanzó como un reto: "Que desees vivir de nuevo cada momento del tiempo, una y otra vez".