P Vuestra propuesta permite que todos los que tengan huerto puedan recoger gratuitamente su plantel para después aportar fruta y verdura al Banco de Alimentos. ¿No es así?
R Primero pensamos en iniciar una plantación directamente desde la cooperativa. Tenemos terrenos disponibles pero suponía una inversión en sistemas de riego y otras infraestructuras. Después se nos ocurrió que podíamos repartir plantas gratuitamente entre toda la gente de Artà que ya tiene huerto y que solo tendría que cuidar unas cuantas más para hacer su aportación de fruta y verdura al Banco de Alimentos. Se trata de cuidar la tierra, la alimentación y a los vecinos que lo necesitan.
P Las imágenes que habéis ofrecido los agricultores y ganaderos durante esta crisis han sido de esperanza. ¿Va en esa línea vuestro 'Planter'?
R A los profesionales que trabajamos el campo nos gusta trabajar la tierra. Estamos acostumbrados a sufrir, y cuando pasa una crisis como la actual nuestro primer pensamiento es '¿Qué podemos hacer para que las cosas vayan un poco mejor?'. Esta es la filosofía en nuestro sector. Y siguiéndola hemos hecho mil cosas: reparto a domicilio, ofrecer trabajo a quien ya no lo tiene, desinfectar las calles o iniciativas como el Planter Solidari... Hemos querido aportar nuestra maquinaria, nuestro tiempo, nuestras manos y lo que mejor nos sale: los productos que nacen en la tierra que cuidamos.
P ¿Está funcionando el 'Planter Solidari'?
R Parece que sí, en los primeros días muchos de los payeses del pueblo se implicaron y además muchos vecinos se han acercado a la cooperativa. Solo durante los primeros cuatro días unas 80 personas pasaron a recoger sus planteles solidarios.
P ¿Les ha sorprendido la respuesta del pueblo?
R Claro que sí. Tanto los agricultores con dedicación plena como muchos otros que ya tienen un huerto familiar para autoconsumo se han implicado, incluso pueden hacerlo los que se animen a plantar el huerto en las macetas de su balcón. Todos son bienvenidos para ayudar a las familias que lo necesitan. Porque el Planter Solidari también es una forma de demostrar que somos muchos los que queremos ayudar, porque cuidar la tierra para que no falten los alimentos es quizás la mejor forma de practicar la solidaridad y el esfuerzo.
P ¿De dónde surgió esta idea?
R Desde la cooperativa de Sant Salvador nos ofrecimos al Ayuntamiento para encargarnos de la desinfección de las calles de Artà. Y a raíz de ese contacto directo con el Consistorio nos enteramos que en el pueblo aumentaba el número de familias que lo pasaban mal. Solo en Artà unas 140 familias necesitan ayuda para poder comer y los socios de la cooperativa nos pusimos a pensar en cómo podíamos ayudarles.
P ¿Qué hay que hacer para conseguir un 'planter solidari'?
R Se trata de ir hasta la Cooperativa de Artà y rellenar un formulario para poder registrar al participante. Después solo hay que pedir cinco, diez o quince plantas solidarias y se la podrá llevar gratuitamente. Solo tendrá que pagar para las que se lleve para su propio consumo. El ayuntamiento de Artà asume el coste de las plantas de los huertos solidarios.
P Y después existe el compromiso de llevar lo que produzcan las plantas solidarias al Banco de Alimentos de Artà. ¿Es así?
R Sí, los que participen en el Planter Solidari llevarán su fruta y verdura a la Cooperativa y nosotros la haremos llegar al Banco de Alimentos. Uno aportará cinco quilos, otro diez, a uno le habrá ido todo estupendamente y a otro los insectos le comerán las plantas y tendrá que tratarlas... Aquí cada uno aportará su excedente de melones, sandías u otras hortalizas, tomates, calabacines, pimientos o berenjenas. Después desde la cooperativa lo llevaremos al Ayuntamiento para que se reparta entre los que lo necesitan.
P¿Son solo los vecinos de Artà los que están invitados a participar en la iniciativa?
R No hemos puesto límites pero la idea es ayudar a los más necesitados del pueblo. Sería fantástico que llegara gente de nuestros municipios vecinos. Se trata de aportar entre todos, cada uno lo que pueda. Tenemos que ofrecer más comida de forma solidaria porque todo parece indicar que en Artà y fuera del pueblo habrá cada vez más gente que tendrá que tocar a la puerta del banco de alimentos.
P ¿Cuándo se prevé que vuestros productos llenen las estanterías del Banco de Alimentos?
R Esperamos que en julio ya podamos llevar hasta allí cajones de fruta y verdura. Pero en la cooperativa tenemos otros proyectos solidarios para desarrollar y no paramos... Lo que está claro es que mientras los agricultores y ganaderos tengamos productos que no podamos sacar al mercado, nadie quedará sin comer.
P ¿Significa eso que los profesionales de 'foravila' donaréis parte de vuestra producción al Banco de Alimentos?
R En Artà tiene una presencia importante la ganadería ovina y en estos momentos existe un importante excedente de corderos, no se venden bien y al mercado le sobran. Y si sobran no es descabellado que los diferentes productores podamos aportar esa carne fresca y de calidad al banco de alimentos. Pero son ideas que aún tenemos que perfilar.
P ¿Cómo profesional de la agricultura, qué es lo que más le ha decepcionado durante el confinamiento?
R Aún me asombran las muestras de agradecimiento, pero me molesta que después de lo que hemos hecho los productores locales, la gente hable de que echa de menos ir a comprar a las grandes superficies que con sus sistemas de compra y distribución ahogan a los productores.