El ayuntamiento de Llucmajor aprobó este miércoles por unanimidad, la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del municipio, con el fin sobre todo de evitar la degradación de una manzana de 92 viviendas del casco urbano que comprende las edificaciones y solares ubicados entre las calles Major, Rei Jaume II, Glòria y ronda Antoni Ramis.
El PGOU de Llucmajor, aprobado el 13 de diciembre de 1985, delimitaba a este espacio un plan especial de reforma interior (PERI) sin que se especificara la finalidad concreta, lo que con el paso de los años, el Ayuntamiento no llegó a redactar. El concejal de Urbanismo, Jaume Tomàs, explica que "esta delimitación ha impedido que se puedan otorgar licencias, afectando no sólo a las parcelas interiores, sino también a las calles principales".
Con esta modificación, según el informe de Urbanismo local, se pretende "desafectar un gran número de viviendas y parcelas cuyas fachadas dan a estas calles, la mayoría de las cuales fueron construidas antes del año 1956, y que con el mantenimiento de esta unidad de actuación se veían limitadas en sus posibilidades edificatorias e incluso condenadas a estados de ruina", ya que de conformidad con lo establecido en el artículo 60 del PGOU, no se podrían otorgar licencias dentro de este ámbito.
En el documento se apunta también que esta modificación del PGOU "no tiene efectos significativos sobre el medio ambiente, por lo que no se cree necesaria la sujeción de la presente modificación puntual a evaluación ambiental estratégica".
Tomàs añade que "no supone ninguna alteración urbanística, ni ningún incremento de edificabilidad ni de densidad, y tampoco modifica los usos del suelo; lo que queremos es que estos propietarios puedan restaurar sus viviendas de forma legal, porque de lo contrario con el paso de los años, estaban abocados a la degradación y abandono de esta zona del pueblo como ya ha pasado en algunas viviendas".
Asimismo, en el transcurso del pleno, Tomàs informó que el departamento de Urbanismo ya ha pedido presupuesto para la ejecución de la dotación de servicios y apertura de la calle Foners, una vía sin salida que "forma parte de este entramado como falso urbano y que, de este modo, pasará a estar también regularizado".