Si el emblemático e histórico Celler Cooperatiu de Felanitx, popularmente llamado es Sindicat, presenta un paupérrimo estado, ruinoso y abandonado, en el polígono de Son Colom se está construyendo una nueva y ambiciosa bodega. La finca es Fangar, del empresario alemán Peter Eisenmann, es la promotora de esta iniciativa, cuyo presupuesto rebasa los seis millones de euros. El deseo es que la primera producción sea fruto de la vendimia de 2016.

El equipo de gobierno del ayuntamiento de Felanitx, comandado por el alcalde Biel Tauler (PP), aprobó de forma definitiva ayer el presupuesto municipal de 2015, que asciende a 16,7 millones de euros. Finalmente se confirmó que el proyecto ´estrella´ de la adquisición de es Sindicat se ha esfumado. En concreto el pasado año se llegaron a anunciar que habría hasta ocho pagos de 500.000 euros (total cuatro millones de euros) y que el artista felanitxer Miquel Barceló gestionará el nuevo complejo tras la compra pública. El afamado pintor lo haría a través de una fundación con carácter internacional participada también por el consistorio. Así abrirían las puertas las antiguas bodegas vinícolas a una colección de pinturas y esculturas propias, complementadas por un espacio dedicado al vino producido en el municipio, a modo de homenaje a su función desde la segunda década del siglo XX hasta 1990, cuando cerró.

No obstante, se ha estancado el proceso. Tauler explica que prosiguen las negociaciones con el dueño de es Sindicat (BIC), el binissalemer Pau Ripoll, quien compró en subasta el edificio industrial en 1993. Y aún deben fijarse bien los límites de la propiedad en cuestión.

Concejales conservadores ahora ya hacen sus comparaciones y valoraciones sobre la nueva bodega de es Fangar, llegando a decir que esta será "es Sindicat 2".

El alcalde no puede disimular su satisfacción por esta iniciativa de es Fangar: "¡Es una pasada!". Muchos son los vecinos que a diario muestran curiosidad por las obras que se ejecutan en el polígono, cerca de la carretera de Campos. Un gran socavón, junto al supermercado Lidl, impresiona a la mayoría. Tauler recuerda que todos los empresarios optan a bonificaciones a la hora de solicitar licencias de obra (el Impuesto de Construcción, ICO) para instalarse en el polígono. Prevé que, en este caso, las arcas municipales recauden más de 100.000 euros por este proyecto. Confía en que esta nueva y monumental bodega (apuntar que desde hace ya varios años es Fangar cuenta con una nave-bodega en el mismo polígono, que seguirá aprovechando tras estrenar la nueva) sea "todo un referente" en Mallorca. Aplaude que es Fangar, que descartó implantarse en Manacor al toparse allí con pegas de normativas (principalmente la declaración de zona forestal frustró la construcción), contrate a varias empresas y trabajadores locales.

En cuanto a la promotora, prevé llegar a embotellar hasta 270.000 botellas al año (actualmente se rondan las 70.000). A destacar su firme apuesta por la calidad, las variedades autóctonas (disposición de 60 hectáreas) y el sello ecológico. Se procurará el menor número posible de bombeos, es decir, el plan aboga por la gravitación (que el vino fluya en pendiente), habiendo exactamente tres niveles básicos y dos, intermedios.

El proyecto es cuidado al detalle. De hecho se ha inspirado en famosas bodegas internacionales, como determinadas de La Rioja.