La Asociació Barri Cívic Santa Catalina exige Ayuntamiento de Palma que cierre de manera inmediata las terrazas ilegales de esta zona de la ciudad.
En un comunicado, esta asociación muestra con fotos restaurantes que siguen ocupando la vía pública a pesar de carecer de permiso para plantar sombrillas, mesas y sillas.
Este miércoles, el mismo día que operarios municipales repintaron las zonas de las terrazas para limitar su espacio, hubo establecimientos que, a pesar de carecer de autorización, continuaron instalando su mobiliario sin "objeción alguna".
Los trabajadores municipales empezaron por la calle Fábrica y continuarán en los próximos días por la Avenida Argentina y la calle de Sant Magí para hacer visibles los límites decretados en la ordenanza municipal.
"Cada empresario conoce perfectamente si tiene o no licencia, pero como algunos se saltan la normativa, los vecinos estaremos vigilantes; pedimos encarecidamente a la Policía Local que también lo esté para levantar actas y tramitar la correspondiente sanción en caso de incumplimiento", señalan los vecinos.
Esta entidad solicita también al gobierno municipal que las terrazas ilegales sean cerradas en cuanto la Policía Local interponga una denuncia.
También proponen que se lleven a cabo sucesivas inspecciones para verificar si los infractores reinciden en los incumplimientos. En este caso, la administración municipal debe "tomar medidas más contundentes", como el cierre del local.
La Asociació Barri Cívic Santa Catalina lleva "siete años luchando" para que se respeten los derechos de los vecinos y los ciudadanos.
Finalmente, esta asociación observa una "actitud activa y comprometida" por parte del gobierno de Cort y exige que no permita "ningún incumplimiento más de las leyes municipales".
