Ayer no llovió e incluso lució el sol. Algo insólito en los últimos años el día de la Revetla de Sant Sebastià. Como también era insólita, al menos desde 2013, la imagen de la calle Oms a la una del mediodía de la víspera del patrón de la ciudad sin apenas gente.

El Drac y un cabezudo de Orgull.

Solo varias personas con el pañuelo verde de la cofradía de Sant Sebastià al cuello y un damasco, también verde y colocado en uno de los balcones, delataba lo que ocurría aquí desde 2013: el inicio de la denominada Revetla Alternativa por parte de grupos de ciudadanos organizados en cofradías que, con el tiempo, han confluido en la Obreria de Sant Sebastià que este año ya aglutina 40.

El ‘chupinazo’ de Pilar Garcés con Mateu Martorell.

Cada una de las cofradías ha ido desarrollando su propia liturgia en torno a la fiesta del patrón, que ayer solo pudo ser recordada a través de las redes sociales debido a la pandemia provocada por la covid-19, que ha suspendido todos los actos festivos. Tanto la Obreria como el colectivo Orgull Llonguet animaron a sus integrante a compartir momentos de la Revetla alternativa del año pasado y de ediciones anteriores, con episodios como el chupinazo en Can Vinagre, las comidas de hermandades, l’encontre entre el brazo incorrupto del santo y el mal que representa la peste y la revolta llongueta, entre otros.

La Revetla alternativa en la nostalgia

Solo hubo una novedad en relación a las ediciones precedentes. Y consistió en el repique de campanas que, a petición de la Obreria, aprobó el cabildo de la Catedral, rememorando una antigua tradición. Algo de agradecer, según la presidenta de la Obreria, Elena Femenia, que manifiestó que este año vivirá un Sant Sebastià «triste» porque «apenas nos hemos podido reunir» para los preparativos. Un sentimiento similar embargó a Mateu Martorell de Can Vinagre ante la perspectiva de celebrar solo y en casa la Revetla de este año. Con «tristeza, nostalgia, y con la esperanza de vivir más fiestas» encaraba Jaume Vic de la cofradia Melicotó este Sant Sebastià tan extraño.

Los pañuelos en el brazo incorrupto.

El ‘chupinazo’ de Can Vinagre en el recuerdo

Uno de los actos que más se recordaron de la Revetla alternativa en redes sociales fue el chupinazo que se realizaba a la una del mediodía en la calle Oms, frente al Bar España, conocido como Can Vinagre. En 2013 se pronunció también el primer pregón festivo por parte del actor Salvador Oliva y, el año siguiente, Pilar Garcés, redactora jefa de este periódico, tomó el relevo. En otras ocasiones también ha dado el sus a los actos festivos Mateu Martorell.

La Revetla alternativa en la nostalgia