La propuesta presentada a la iniciativa Life de la Unión Europea permitiría la reducción de la denominada isla de calor en el entorno del cauce de sa Riera, consiguiendo una media de cuatro grados de temperatura menos que los registrados en su entorno con la siembra masiva de arbolado y la permeabilización del terreno para aprovechar el agua. A 30 años vista se conseguiría además reducir las emisiones de dióxido de carbono en 1.553 toneladas.