Para tranquilizar al principal país emisor de turistas que viajan a Palma, la Fundació Turisme Palma de Mallorca 365 ha viajado a Alemania con la intención de explicar que el botellón sigue prohibido en la Platja de Palma pese a la declaración de nulidad de la ordenanza cívica y que se continuará persiguiendo el incivismo.

El gerente de la fundación turística, Pedro Homar, se reunió ayer con el director de la Oficina Española de Turismo en Berlín, Manuel Butler. La intención de Homar es reforzar la idea de que la Platja de Palma es un destino familiar y vender el discurso de que los visitantes no se encontrarán molestias y prácticas incívicas cuando visiten el litoral palmesano. También insistió en que la Platja de Palma es una zona segura.

La reunión también sirvió para preparar la próxima edición de la feria turística ITB, que se celebrará en Berlín la segunda semana de marzo. El alcalde de Palma, José Hila, y la regidora de Turismo de Cort, Joana Maria Adrover, tienen previsto viajar a la capital alemana para asistir a la feria.

De cara a la promoción de la temporada baja, Butler ofreció a la fundación turística una campaña de información con reuniones entre los representantes de Palma y algunos actores del sector turístico del país, como touroperadores, compañías aéreas y medios de comunicación.