El único catedrático de control de plagas de España, Ricardo Jiménez, asistió ayer a la presentación del ´dron´ de la empresa Lokímica, a la cual asesora. El experto explicó que el mosquito tigre tendrá una progresión "rapidísima" en Mallorca, porque "tiene mucha movilidad y su reproducción es muy veloz". "Quienes diseminamos al mosquito tigre somos los propios humanos al viajar en coche, en barco, avión o en un contenedor de transportes", comentó el profesor.

Jiménez indicó que la lucha contra este insecto "requiere una gran concienciación social", porque se pueden reproducir en cualquier pequeño espacio donde haya agua, como, por ejemplo, "el plato bajo una planta, el sumidero de la terraza o el jardín de un chalé". "Para que la gente se haga a la idea, un mosquito tigre puede plantar hasta 200 larvas en el tapón de una botella, siempre que tenga agua. De esas 200, la mitad serán hembras, que son las que pican y pueden transmitir enfermedades como el dengue", declaró el catedrático, que lleva más de 40 años investigando sobre las plagas urbanas.

Para poner remedio a la reproducción de los insectos, Jiménez aconseja "responsabilidad" a toda la población. "Lo que puede hacer un ciudadano para ayudar es muy simple: que tire el agua del plato de las plantas y lo limpie cada dos días, que cambie el agua del plato del perro con la misma frecuencia, y que no riegue el césped del jardín todos los días si, al meter el dedo en la tierra, nota que ya está humeda", apuntó.