Después de un largo periodo, mas de cuarenta días, desde la publicación del Decreto de Estado de Alarma, por el que el gobierno ha ordenado el confinamiento de la ciudadanía, confinamiento que se esta haciendo interminable, muy largo, empieza la gente a pensar que se podrían y deberían haberse hecho las cosas de otra manera, haber informado, haberse preparado, -hubo tiempo suficiente-, apelado a la responsabilidad ciudadana, en definitiva haber procedido de otra forma ante la pandemia del COBID-19. Hay que poner en valor el comportamiento ejemplar de la población, la heroicidad de los profesionales de la sanidad. Y se puede poner en duda, dado el caos creado, la organización del "sistema sanitario público" del que tanto hemos presumido. Algo falla en el sistema. Una cosa son los profesionales sanitarios que están haciendo más de lo que humanamente es posible y otra el ministerio de Sanidad que ha mostrado sus carencias, su falta de previsión, de control, imputable solamente a sus gestores. Si nos atenemos a los resultados se puede llegar a la conclusión de que el gobierno se encuentra desconcertado, no se sabe a ciencia cierta el número de infectados, el número de personas muertas. ¿Dónde están los respiradores?,¿las mascarillas?, la improvisación es el día a día, la incapacidad se evidencia. Parece que solamente se utiliza el decreto del Estado de Alarma para fines políticos, sin tener en cuenta las consecuencias personales y económicas que de ello se están derivando.
Veamos algunos datos a fecha 20 de abril:
· Japón, con una población de 127 M, ha tenido 8.488 casos y 169 muertos.
· Alemania, con 83 M de habitantes, 138.286 casos, y 4.105 muertes.
· Francia, con 67 M de habitantes, 143.303 casos, y 18.631muertos.
· Reino Unido, con una población 67 M, 108.692 casos y 14.576 muertos.
· Y España con una población de 47 M, 200.000 casos y 20.043 fallecidos.
Es decir que tanto en cifra absolutas como relativas las consecuencias de la pandemia en España son peores que en países de nuestro entorno.
El gobierno está haciendo un excesivo uso del decreto del Estado de Alarma. La Constitución Española no permite que al amparo de este decreto se prohíba la libre circulación, medida que solo puede adoptarse bajo la cobertura de la declaración del Estado de Excepción, (Artº 55.1 de la CE). En realidad, se está obligando a un arresto domiciliario sin la debido amparo legal. Pablo Iglesias cacarea en cada ocasión que puede, el artículo 128 de la Constitución para recordar "que toda la riqueza del país está subordinada al interés general" y debería de saber que tampoco puede aplicarse este artículo a la ligera y al margen de las otras prescripciones constitucionales que garantizan indubitadamente la propiedad privada. ¿Están aflorando ya tentaciones totalitarias?, ¿se está aprovechando esta crisis sanitaria con fines partidistas?
La Constitución es una unidad y no se puede aplicar, a conveniencia, alguno de sus artículos sin relacionarlas con el resto. Así pues, ya se publicó un decreto el 11 de abril que afecta a las viviendas privadas que ha causado una gran alarma entre los propietarios de inmuebles y ha alterado seriamente al mercado inmobiliario. España, por el momento, es un Estado de Derecho y no tiene sentido que ante esta situación se esté debilitando la democracia. ¿Se esta intentando un cambio de régimen? Mario Vargas-Llosa, en reciente entrevista en el diario El País dice claramente, "la peste le ha venido muy bien a los enemigos de la libertad", en clara referencia a Pablo Iglesias. Debemos confiar en los tribunales, que, desde su independencia respecto a las decisiones gubernamentales, protegerán el Estado de Derecho que tanto esfuerzo supuso su construcción.
Geraldine Schwarz, historiadora franco-alemana, autora de la novela Los amnésicos (Tusquets 2.019), explica que los alemanes no se oponían, miraban para otro lado, cuando Hitler, que llego al poder en unas elecciones democráticas, empezó a legislar imponiendo sus ideas totalitarias. El CIS de Tezanos ya ha planteado una pregunta tremenda que indica por donde van sus intenciones: "¿Cree que el Ejecutivo debe prohibir informaciones sobre el gobierno que se consideren poco fundamentadas?" La Constitución, S.r Tezanos, consagra en su artículo 20 "la libertad de expresión y difusión libremente, de pensamientos, ideas y opiniones, mediante la palabra, escrito o cualquier otro medio de reproducción, quedando prohibida la censura previa". Hay que luchar, por supuesto, contra la pandemia, con responsabilidad, con mucho cuidado con los métodos que se empleen, pues el miedo termina con que sean aceptados comportamientos antidemocráticos. Ya han empezado las delaciones entre vecinos, detenciones por pasear el perro por la montaña o porque un chico se bañaba solo en el mar y por la noche. ¿Qué daño pueden infligir o recibir estas personas?¿Se estaría en situación de prisión preventiva?
