Una noche más, el restaurante de 'First dates' abrió sus puertas para recibir a nuevos solteros. En esta ocasión, el dating show recibió la visita de Miriam, una soltera de 21 años que se definía como una persona muy sociable. "Yo estoy loca del coño, soy muy echada para adelante".

La joven venía en busca de un soltero con "vidilla" y tatuado. Sin embargo, la soltera quedó sorprendida al conocer que su compañero de velada era de origen finlandés. El programa de Cuatro le concertó una cita con Aleski, un soltero de 26 años de procedencia escandinava que, a pesar de sus orígenes, siempre había vivido en Málaga.

Las primeras impresiones entre ambos fueron muy distintas. Míriam ponía en evidencia "la pinta de guiri" de Aleski, mientras que el joven achacaba la juventud de la soltera. Ya en la mesa, el finlandés quiso saber las razones que hicieron acudir al programa a Miriam.

"En el amor me ha ido regular. La cosa está muy chunga para tener algo serio", sentenciaba la joven. Por su parte, Aleski confesaba haber mantenido una única relación sería de cuatro años en toda su vida. Ambos se lanzaron varios piropos sobre sus ojos y la joven pilló a Aleski mirando su escoté tras revelar que había sido operada.

La decisión final, tras pasar por el reservado del programa, hizo que tanto Aleski como Míriam decidiesen no tener una segunda cita. "Lo único bonito que tiene son los ojos", revelaba la joven durante los últimos minutos de la velada como argumento para rechazar a Aleski.