Cae la noche en Formentera y nace un nuevo mundo. Un mapa estelar por explorar se abre ante los ojos de aquellos que alzan su mirada al cielo. Un último reducto de noches libres de contaminación lumínica.

La primera edición de Formentera Astronómica, que tuvo lugar los pasados días 11, 12 y 13 de junio, permitió disfrutar a un buen número de apasionados de la astronomía de los cielos de la isla. El evento, organizado por el área de Turismo del Consell de Formentera, estuvo coordinado por la empresa Pidelaluna Events, y contó con el patrocinio de la AETIB y la colaboración de la Asociación Astronómica de Formentera.

Los organizadores de las jornadas plantearon tres días plagados de actividades destinadas a todos los públicos con el objetivo de motivar a los participantes a conocer la isla de una manera diferente y segura. Junto a las charlas sobre basura espacial, vida extraterrestre o fotografía nocturna, también se ofrecieron sesiones de observación de las estrellas guiadas por expertos.

Durante todas las mañanas, los más pequeños pudieron disfrutar de talleres infantiles en los que se les enseñó a crear manualidades espaciales utilizando materiales reciclados. A su vez, los más curiosos pudieron realizar tours educativos gracias a juegos de Realidad Virtual que les permitieron conocer más detalles sobre los astros de una manera inmersiva e interactiva.

Turismo científico

«La ciencia está de moda», afirmó Inma Aguilar Nàcher, directora General en la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología, en la sesión inaugural de las jornadas. Aguilar destacó la idea de aprovechar la «mirada hacia a la ciencia» que se está produciendo a raíz de la pandemia y plantear una apuesta mayor por un turismo científico que beneficie no solo a los territorios que lo alberguen sino también a los viajeros que lo experimenten.

Participantes de los talleres de realidad virtual. | PIDELALUNA

Marga Gual Soler, experta en Diplomacia Científica, puso en valor los campos de la astronomía y la astrofísica destacando su importancia a la hora de atraer visitantes. «La astronomía es un campo que nos une, nos permite entender de dónde venimos y a dónde vamos y en los últimos años, se ha convertido en una notable atracción turística y cultural», afirmó.

Por su parte, Alessia Comis, CEO de la agencia Pidelaluna Events y coordinadora del evento, destacó uno de los principales objetivos de la feria: «Inspirar y formar a niñas y niños para que se acerquen a la ciencia de manera lúdica y atractiva y que aprendan fundamentos de astronomía a la vez que disfrutan de la naturaleza incontaminada del último paraíso del Mediterráneo».

La exploración del universo

En la sesión En busca de vida extraterrestre, el investigador del CSIC Carlos Briones profundizó en la posibilidad de que exista vida en otros planetas. Briones hizo hincapié en el hecho de que conocer cómo se ha formado la vida en la tierra nos da pistas de si se podría haber generado también en otros lugares. El investigador afirmó que, si bien es posible que los procesos de generación de vida observados en la tierra se hayan podido replicar en otros planetas, tratar de hallarla se asemeja a buscar «un aguja en un pajar».

Eva Ramírez, experta en GNSS, también destacó el hecho de que el conocimiento del universo y los avances espaciales hayan ido ligados al propio conocimiento de nuestro planeta. Además, habló sobre cómo el hombre ha sabido guiarse por el espacio, primero con las estrellas y ahora gracias a los satélites de posicionamiento como los GPS o los Galileo europeos.

Eva Ramírez durante su ponencia. | PIDELALUNA

Por su parte, Guillermo De Haro, profesor del IE Business School, aportó la visión más cinematográfica con su conferencia sobre las verdades y mentiras de la ciencia ficción y los paralelismos con la historia de la conquista del espacio. Del Haro puso en valor la importancia del género de la ciencia ficción a lo largo de la historia del cine, desde El Viaje a Luna de George Méliès (1902) a las obras más actuales.

Matheus Kriginsky, divulgador de la UIB, realizó una introducción a la física del sol. «Este astro nos afecta de muchas maneras. Afecta al viento, a las mareas o a la fotosíntesis de las plantas, entre otros. Estudiarlo genera más preguntas que respuestas pero eso es lo más divertido» , indicó.

El reto de la basura espacial

Miguel Ángel Molina, director de desarrollo y estrategia de GMV, habló de los peligros de la basura espacial. Molina comparó el tratamiento de los residuos con la manera de afrontar una pandemia. «Lo primero es prevenir, tratar que no ocurra. Luego hay que monitorizar y chequear qué está pasando, y por último, tratar de curar», explicó.

La mejor manera de prevenir su generación pasa por crear reglas como que los satélites no puedan estar en órbita más de 25 años o que se construyan de manera más robusta para evitar el desprendimiento de ciertas piezas. «Ahora mismo tenemos identificados entre 20.000 y 25.000 objetos peligrosos, hecho que ayuda a saber dónde están en cada momento y evitar que choquen», destacó. Molina afirmó que todavía queda «mucho camino por recorrer» para solucionar el problema pero subrayó que España se está posicionando como un país puntero en materia de identificación y gestión de basura espacial.

IA y fotografía nocturna

Durante su conferencia, Asier Arranz, divulgador de la Inteligencia Artificial, ayudó a conocer un poco mejor esta tecnología. Este «curioso de profesión», habló de las aplicaciones de la AI con casos prácticos como la ayuda en la detección de enfermedades como la malaria gracias al juego MalariaSpot o la detección de asteroides.

De la mano de Dalila Dawid, partner solutions manager de Facebook e Instagram, los asistentes pudieron aprender los aspectos básicos de la fotografía nocturna. Dawid, quien ofreció multitud de consejos y directrices, resumió las bases para fotografiar la vía láctea en tres pilares: planificar, conocimiento del equipo y post producción.

Astros, humor y divulgación

El toque de humor divulgativo vino de la mano de Adrián García Candel, divulgador científico del IFISC, y de Manuel González, astrofísico y astrocoplero. Adrián, más conocido como El Físico Barbudo, habló sobre la mitología de los astros. «Este cielo estrellado esconde un montón de historias sobre héroes, heroínas, dioses, diosas y animales cruelmente asesinados por Hércules», bromeó.

Por su parte, Manuel González deleitó al público con sus astrocoplas divulgativas. «Poseído» por el espíritu de la mismísima Lola Flores, el astrofísico consiguió arrancar el aplauso de los asistentes tras sus explicaciones del telescopio ALMA o la muerte de las estrellas, entre muchos otros temas, a ritmo de las mejores coplas de La Faraona.