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Boulevard | «Los hoteleros sabemos lo mismo que vosotros, nada»

Mallorca tiene más turistas a recuperar que cualquier otra geografía, porque el año pasado perdió el 88 por ciento de sus visitantes llegados del espacio exterior

Vinicius no solo preparó su sensacional temporada en Mallorca, sino que recogió en un vídeo el influjo milagroso de la isla.

Si una calle es fascista debería notarse a primera vista, véase Avenida Hitler. Cuando se necesitan tantos comités de expertos para graduar el contenido franquista, el simbolismo criminógeno debe hallarse diluido. Por supuesto, veníamos a hablarles de otra cosa. Pero antes, la mixtificación del nomenclátor se extiende al vacunátor.

Las autoridades se descuelgan esta semana con el portentoso titular de que «El número de vacunados contra el coronavirus supera en Balears al número de contagiados». En primer lugar, ¿y qué? La prestancia mítica de la ridícula estadística se debe a que fue formulada por Pedro Sánchez. En efecto, el mismo presidente que dijo que el número real de personas que habían pasado la covid triplicaba las cifras oficiales. Ergo, es falso que los vacunados superen a los contagiados, salvo que se añada el matiz de «casos registrados» que omitieron los fantasiosos.

Y ahora sí vamos con el estado de alarma. Por ponerlo en positivo, Mallorca tiene más turistas a recuperar que cualquier otra geografía, porque el año pasado perdió el 88 por ciento de sus visitantes llegados del espacio exterior. O sea, diez puntos por encima o por debajo de la media estatal. Para entender el problema ya que no podemos resolverlo, hemos efectuado una ronda entre próceres hoteleros.

Abrimos boca con el lugarteniente del Rey Sol, el gigante entre los ejecutivos seniors que abrió el Caribe a machetazos para levantar Eldorado de los conquistadores mallorquines:

«No sé por qué me preguntas sobre la temporada. Los hoteleros sabemos lo mismo que vosotros, lo que se publica en los periódicos. O sea, nada».

Se expresa con el temple reseco que define a una estirpe. En busca de un poco más de ornato, nos dirigimos al número dos del imperio fluctuante, el golden boy que se han disputado todos los gigantes:

«Nadie sabe nada sobre el futuro del turismo ahora mismo. La descoordinación entre autoridades europeas, españolas y autonómicas recuerda al camarote de los hermanos Marx».

Y pese a su optimismo vital, esboza un presagio:

«No sé quién va a pagar las facturas». Queda claro que el hilillo de Semana Santa no sirvió ni de tentempié, pero como los hoteleros locales siempre denuncian a los gigantes por tener su negocio fuera, vamos con el hereu de un empresario centrado en Mallorca, con activos de lujo:

«Los hoteleros estamos muy preocupados por los anuncios de Francina Armengol a favor de prolongar el toque de queda. Es imposible llevar a cabo una temporada con restricciones duras».

Amén, y esperen al día en que la industria descubra que si no cuidamos a los turistas borrachos y drogadictos, se irán a otro sitio.

En la imagen que hoy nos ilustra, la sensacional temporada de Vinicius en el Real Madrid tuvo como preludio unas jornadas de vacaciones y de intensa musculación en Mallorca. El brasileño reconoció el influjo milagroso de la isla en un vídeo con millones de visitas, la mejor promoción gratuita de un territorio ingrato, recogemos aquí una escena. Gracias a aquellas vacaciones, Jorge Valdano pudo escribir que «Vinicius adelanta por el arcén». Y recuerden dónde leyeron antes que René Mäkelä, el monumental pintor mallorquín que se disputan las estrellas, es el responsable del mural definitivo en el chalé del delantero blanco.

Miles de personas me paran por la calle, para aprovechar mi erudición y preguntarme en qué momento de la historia percibe Felipe de Edimburgo que Isabel II está dispuesta a prescindir antes de su marido que de su trono. En concreto, eso ocurrió en la segunda temporada de The Crown.

La actividad policial se concentra en Mallorca en perseguir a los funcionarios que persiguen a corruptos, y en leer tebeos. Hasta cuatro sindicatos policiales denunciantes han visto cómo un juzgado palmesano archivaba su querella contra el cómic On és l’Estel·la, que me obligaron a comprar por solidaridad con su autor. Me alegro por el excelente dibujante mallorquín Toni Galmés pero en ningún caso extiendo el pláceme a la editorial, que obstruyó mi trabajo.

Reflexión dominical discursiva: «Cuanto más le dejes hablar, más elocuente te encontrará».

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