El teniente general retirado del Ejército y concejal de Vox en el ayuntamiento de Palma, Fulgencio Coll Bucher, calificó de «barbaridad» las afirmaciones contenidas en un chat de antiguos jefes militares en el que uno de ellos, en concreto, el ex general de división del Ejército del Aire, Francisco Beca, afirma entre otras cuestiones, creer que se queda «corto fusilando a 26 millones» de españoles. 

Coll, que también ocupó el cargo de Jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra siendo presidente del Gobierno el socialista José Luis Rodríguez Zapatero y ministra de Defensa Carmen Chacón, manifestó que, a su entender, este exmilitar debería pedir disculpas por sus afirmaciones. No obstante, recordó que estas se han realizado en un marco privado y consideró que estas frases «totalmente ridículas y absurdas, que no se las cree ni él», se han sacado de contexto con el fin de «desviar al atención sobre el malestar existente».

El también concejal de Vox defendió el derecho que tienen los militares retirados a manifestar sus opiniones políticas. 

Aunque no ha suscrito como otros exmilitares mallorquines la carta contra el Gobierno, Coll apoya su crítica ante «la deriva de la Moncloa»

En concreto, en relación al manifiesto impulsado por el teniente general Emilio Pérez Alamán, presidente de la Fundación Francisco Franco, y que ha sido firmado por exmilitares mallorquines de alta graduación en el que abogan por «revertir la peligrosa deriva en que se ha situado nuestra patria», Coll afirmó que «está completamente dentro de la ley, porque los militares retirados como yo mismo dejamos de tener la obligación de neutralidad política que se nos exige en activo, y recuperamos el derecho de cualquier ciudadano para decir lo que pensamos y manifestarlo públicamente».

Fulgencio Coll consideró asimismo que estas iniciativas como la de este manifiesto «son de personas que piensan que la situación es lo suficientemente grave para expresar públicamente la preocupación que tienen»

No obstante, se desligó de esta iniciativa porque, «desde hace dos años estoy en un partido político para defender unos principios con el trabajo diario desde las instituciones y no con manifiestos puntuales». 

Recordó que el 13 de enero de 2018 ya manifestó que consideraba que la situación de España era «mala», por lo que al igual que otros exmilitares, había decidido dar «un paso al frente y afiliarme a un partido político, algo que nunca había pensado hacer».

Recordó igualmente que hace un año escribió un artículo en que decía que Pedro Sánchez era «un problema para la seguridad nacional y la reacción fue brutal, hasta el punto de acusarme de golpista, cuando lo primero que propugno es el respeto a la Constitución».

En su opinión, es normal que proliferen manifiestos de estas características, en los que se afirma que el actual Gobierno «es dañino para la convivencia de los españoles» porque «la situación no les gusta nada ya que se está rompiendo el consenso constitucional del 78, y tenemos un Gobierno sometido a las presiones y negociaciones con grupos políticos que van contra España o contra la Constitución»

Más pronunciamientos

Asimismo, consideró que lo anterior provoca el rechazo de una parte de la ciudadanía y auguró «que cada vez habrá más pronunciamentos de estas características porque la gente está asustada por todo lo que está pasando».

Según Coll, en Alemania y en el Fondo Monetario Internacional «hay gente que también está muy preocupada, hasta el punto de que recomiendan no invertir en España porque ahora mismo tenemos un gobierno prácticamente comunista y con un futuro muy negro».

Aseguró que, «cuando las cosas no van bien» en democracia, «la gente sale a la calle, que es lo que ha hecho la izquierda toda la vida»

Insistió en que, si bien no ha firmado esta carta, «respeto a quienes sí lo han hecho y me parece muy bien que haya una reacción para criticar la deriva que ahora mismo se está impulsando desde la Moncloa».