Todas las familias de Balears que han perdido a algún ser querido estas últimas semanas han tenido que asumir, además del dolor por la pérdida, la frustración e impotencia añadida que suponen las restricciones impuestas sobre las ceremonias funerarias.

El día 13 el Govern limitó a un máximo de 30 personas los asistentes a los velatorios, y poco después el Obispado suspendió los funerales. Algunas funerarias ya por su cuenta acotaron aún más la afluencia al tanatorio para estas ceremonias e incluso algunas ya decidieron suprimir este servicio del todo. Desde el lunes, por decreto del Gobierno central, todos los velatorios quedan prohibidos del todo y a los entierros solo puede asistir un máximo de tres personas. El dolor no entiende de decretos de alarma, pero el luto también está confinado.

"Con el tema de los velatorios había gente que todavía no era consciente, dependía de la consciencia de cada uno, muchas familias lo dejan para después pero otras la celebraban y un velatorio con hasta 30 personas si la sala es pequeña... pues ya me dirás", indica Miquel Bennàsar, responsable de la Funerària Molondro, que por eso cree que está bien que se adopten medidas como las anunciadas el lunes, aunque ve "exagerado" limitar a tres familiares la asistencia a los funerales: ¿Y si la fallecida tenía cuatro hijos? ¿O si deja un marido y tres hijos? Tendrán que elegir quién va al entierro y quién no, eso es muy duro. ¿Y los nietos, que igual pasaban todo el día con ella, tampoco pueden ir al entierro?".

Así se expresa Bennàsar, que atiende en la zona de Pollença, Sa Pobla, Alcúdia, Sa PoblaAlcúdiaSanta Margalida y alrededores. En su opinión, se podría haber limitado la asistencia al entierro a la familia más próxima, independientemente del número de miembros: la mujer o el marido, los hermanos, los hijos y los nietos.

"En los cementerios se pusieron medidas de protección para los familiares, ahora podrían seguir asistiendo a los funerales los familiares directos usando estas medidas y guardando la distancia recomendada", cree Bennàsar.

Según la última directriz, las tres personas que acudan al entierro no podrán estar a menos de un metro unas de otras.

Aunque como ya se ha dicho muchas funerarias mallorquinas ya habían sustituido los velatorios 'mutitudinarios' por ceremonias sencillas con la familia más próxima, Sanidad justificó la suspensión de toda ceremonia fúnebre ya que "debido a las especiales características que las rodean" es "difícil" asegurar el distanciamiento. Las últimas semanas en todas las esquelas publicadas por la Funeraria Molondro incluían recomendaciones como: "Saludaros, pero... no os déis las manos ni besos". Mantener la distancia cuando lo que necesitas es proximidad es, como dice el ministerio, difícil. Y doloroso.

Ayuda psicológica

El Colegio de Psicólogos de Balears (COPIB) y la Empresa Funerària Municipal de Palma han activado un servicio gratuito presencial de atención psicológica en el tanatoriod para ayudar a las personas que pierdan a un ser próximo estos días. Habrá profesionales de guardia de lunes a viernes de las 9 a las 19 horas y los sábados hasta las 14 horas. Además el COPIB tiene un teléfono diario (de 9 a 19 horas) de atención a personas en duelo: el 619747507.

CONTENIDO_RELACIONADO

  • Los velatorios quedan prohibidos y los entierros, limitados a tres personas
  • Consulta todas las noticias del coronavirus en Mallorca

FIN_CONTENIDO_RELACIONADO