"Tener el virus del papiloma humano (VPH) no implica que vayas a desarrollar un cáncer de cérvix, tu sistema inmunitario lo puede eliminar", comienza Imanol Mangado, representante de un nuevo método (Mía Xytotest) para, asegura, detectar con más fiabilidad situaciones peligrosas en estos procesos cancerígenos.

Este test, desarrollado por un laboratorio noruego y de patente norteamericana, permite con una sencilla recogida de la muestra determinar la presencia del VPH en el ADN. "Y solo detecta los genotipos del virus de alto riesgo. Hay más de 200 tipos de VPH y solo 14 son cancerígenos.

Pues bien, si el test confirma la presencia de uno de estos genotipos de riesgo, con la misma muestra se puede hacer un marcador tumoral que determina si el paciente puede llegar a desarrollar un cáncer. En ese caso, la prueba ha de repetirse al año para ver si su sistema inmunitario lo ha eliminado", resalta las ventajas de su test. Con las citologías, compara, un patólogo analiza si hay malformación celular en la muestra tomada en el útero y, en ese caso, se ha de hacer una nueva revisión y una recogida de tejido que se biopsia y determina si hay cáncer o tan solo infección viral.