"¿De qué color político va a ser tu conseller?" fue una pregunta recurrente entre los representantes empresariales ayer reunidos en la Llotja tras la toma de posesión de Francina Armengol como presidenta del Govern. Si la respuesta era que del PSOE, se le felicitaba. Si decía que de Podemos, la expresión era mucho menos alegre. Porque esta fue una de las cuestiones más comentadas tras el acto, junto a las diferentes teorías sobre el origen en la crisis de Mésorigen en la crisis de Més, con una como más analizada: el cargo, y especialmente el sueldo de senador autonómico, cuenta con muchos aspirantes.

El protagonismo de Més se vio tanto a la entrada como a la salida de la toma de posesión: todos pendientes de la llegada de Bel Busquets, Fina Santiago, Vicenç Vidal y Miquel Ensenyat junto a Armengol y sus consellers en funciones, y de la rapidez con que abandonaron el acto para acudir a su asamblea en Lloseta.

La asistencia fue numerosa y con una amplia representación empresarial, empezando por los presidentes de las patronales CAEB y PIMEM, Carmen Planas y Jordi Mora respectivamente, junto a sus homólogos en diferentes asociaciones sectoriales, como en el caso de la federación hotelera de Mallorca, al estar presentes tanto su máxima dirigente actual como su predecesora, Maria Frontera e Inma de Benito por este orden, sector que se vio reforzado por la discreta presencia del vicepresidente ejecutivo de Meliá Hotels, Gabriel Escarrer; los presidentes de las patronales de comercio Toni Gayà (Afedeco) y Antoni Fuster (Pimeco), felices porque el concejal palmesano Alberto Jarabo, de Podemos, les ha comunicado que las luces de Navidad se encenderán el 28 de noviembre, día previo al Black Friday; el de la asociación de restauración de Mallorca, Alfonso Robledo; o el de la patronal de pequeñas empresas de rent a car, Ramón Reus, entre otros. A ellos se suman el presidente de la Autoridad Portuaria, Joan Gual; el de ISBA, Eduardo Soriano, y el de la Cámara de Comercio, Antoni Mercant. Por la parte sindical, asistieron el secretario general de UGT en las islas, Alejandro Texías, y el secretario de Comunicación de CCOO, Francesc Mellado.

El acto contó también con representantes del mundo de la enseñanza y de la cultura como el rector de la Universitat, Llorenç Huguet, o el presidente de la Obra Cultural Balear, Josep de Luis; y de la Justicia, como el presidente del Tribunal Superior de Justicia de las islas, Antoni Terrasa; el presidente de la Audiencia provincial, Diego Gómez-Reino; y el fiscal superior, Bartomeu Barceló.

Igualmente fue numerosa la presencia de protagonistas de la política y de las Administraciones públicas, como los invitados estrella al acto: el presidente del Senado, Manuel Cruz, y los ministros de Fomento, José Luis Abalos; de Transición Ecológica, Teresa Ribera; y de Agricultura, Luis Planas; junto al alcalde de Palma, José Hila, la que va a ser presidenta del Consell de Mallorca, Catalina Cladera, o el que será vicepresidente podemita del Govern, Juan Pedro Yllanes. A ellos hay que sumar representantes de las diferentes formaciones políticas, como el secretario general del PP balear, Antoni Fuster; los portavoces de El Pi y Ciudadanos en el Parlament, Jaume Font y Marc Pérez Ribas respectivamente, y el de Vox, Jorge Campos.

Este último, junto a su cabeza de lista en Palma, Fulgencio Coll, y el resto de representantes deVox, protagonizaron una de las anécdotas, al estar entre los primeros en abandonar la fiesta, para reunirse todos luego en la mesa de un bar que se encuentra a pocos metros del lugar.

También estuvo presente el expresident balear del PSOE, Francesc Antich, al que alguno le preguntó cuándo iría a la Delegación del Gobierno como titular de la misma.

Entre los más solicitados estuvo el que va a ser titular de Turismo y de Trabajo, Iago Negueruela, mientras que representantes del sector del transporte se felicitaron por la probable continuidad como conseller en esta materia de Marc Pons, alegando que es mejor tener a alguien con experiencia.

A la hora de buscarle defectos al acto, se señaló el deficiente sonido, especialmente en el caso de la actuación musical con que se abrió, y el calor que hacía en el interior de la Llotja. Eso hizo que alguno deseará, en términos de golf, un eagle, término que se refiere a completar el recorrido con dos golpes por debajo del par. Es decir, "que acabe rápido".