La sección tercera de la Audiencia Nacional dictó hace tiempo un auto, que ha sido divulgado este martes por un diario digital, contra la célula islamista fue detenida en Mallorca en julio del 2017 y que, según el juez Santiago Pedraz, planeaba una matanza con cuchillos en una plaza de Inca. El tribunal puso en libertad con fianza al imán salafista Tarik Chadlioui, arrestado en esa operación en Gran Bretaña y luego extraditado a España, donde fue encarcelado, y señaló que el presunto jefe de la cédula es una radical, pero no es violento y destacó que su último contacto con los sospechosos de Mallorca fue en julio del 2015, dos años antes de los arrestos.

El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz sostuvo en un auto dictado en julio del 2017 que uno de los cuatro yihadistas detenidos en Mallorca por formar parte de una célula del Dáesh "habría planeado" una "matanza" a puñaladas en la plaza del ayuntamiento de Inca y "habría manifestado su intención de convertirse en mártir".

Pedraz envió a prisión provisional, comunicada y sin fianza, a los cuatro arrestados por el delito de integración terrorista, y señaló en el auto que uno de ellos podría haber planeado "acciones violentas" como la citada matanza que, presuntamente, consistía en apuñalar a los viandantes.

Después de analizar las conversaciones telefónicas, las vigilancias, seguimientos y material audiovisual incautado, el juez concluyó que los cuatro detenidos eran miembros de un grupo creado por el imán Tarik Chadlioui, un líder predicador salafista que supuestamente reclutaba a personas para organizar células yihadistas y que se había desplazado en varias ocasiones desde el extranjero a Mallorca para poner en marcha la estructura terrorista.

Ahora la sala tercera de la Audiencia Nacional ha enmendado la plana al instructor y ha descafeinado la parte del atestado policial relativa a Tarik Chadlioui. A juicio de los magistrados, la investigación "aparece sustentada en indicios muy alejados en el tiempo y de relevancia cuestionable". Estas razones llevaron al tribunal a revisar la situación prisión incondicional en la que se encontraba el imán desde su arresto. En el momento de su detención Tariq Chadlioui ya era conocido internacionalmente. Muy activo en las redes sociales, sólo su cuenta de Facebook tiene ahora cerca de 30.000 seguidores. También gestiona un canal de Youtube cargado de contenido, discursos y prédicas.

Su arresto tuvo lugar en Reino Unido y en febrero de 2018 ingresó en prisión España tras la entrega de las autoridades británicas. En su defensa alegó que todo el material que le habían incautado, lejos de enaltecer a Estado Islámico, era "pacífico" y que precisamente su función consistía en contactar con personas radicalizadas para alejarlas de los postulados terroristas. A su juicio, la interpretación que hizo la Policía española de su labor fue "sesgada" y con el objeto de "criminalizar a la religión islámica".

La causa se inició después de que la Comisaría General de Información de la Policía Nacional encontrase en su canal de Youtube una serie de tres vídeos titulada "Toufiq se fue a Siria", protagonizados por este imán expulsado en su día de Egipto, donde tiene la prohibición de regresar. Tampoco puede predicar en Marruecos, dónde nació hace 44 años. Los vídeos tratan sobre un joven residente en España que se convierte al islamismo salafista y se marcha a Siria.

La conexión con Mallorca se debía a que para la realización de esos vídeos, grabados en el verano de 2015, el imán había contado con la colaboración de un grupo de fieles asiduos a la mezquita Al Fajar de Inca, sobre los que ejercía una gran influencia a juicio de los investigadores. Se habían conocido previamente a través de las redes sociales y en su desplazamiento a España, el imán llegó a alojarse en casa de uno de ellos.

Ahora las defensas de los cuatro arrestados en Mallorca, tres de los cuales fueron puestos en libertad en enero del 2018, pedirán el archivo de la causa contra sus representados.

A pesar del auto, Tarik Chadlioui sigue imputado en el sumario del juez Santiago Pedraz.