"En Balears habrá aproximadamente unas doce mil personas que tienen la hepatitis C sin saberlo", estimó ayer Susi Buades, presidenta de la Associació Mallorquina d'Afectats per Hepatitis C (AMAHC), antes de advertir que un 20% de estas personas acabarán desarrollando un cáncer hepático o precisarán de un trasplante de hígado.

El Día Mundial contra esta enfermedad se celebró ayer y desde AMAHC se quiso resaltar que los nuevos tratamientos contra esta enfermedad vírica permiten tasas de curaciones que oscilan entre el 85% y el 100%. "No conozco a nadie que no se haya curado", destacó Buades.

La presidenta aprovechó la situación para destacar el trato de favor que el Servei de Salut les ha dispensado: "Somos la segunda comunidad del país que, porcentualmente, más tratamientos hemos dado a los enfermos. Los hospitales públicos y sus servicios de farmacia nos han tratado muy bien, hemos sido sus pacientes más mimados", destacó.

Buades cuantificó en unas siete mil personas las infectadas de hepatitis C en las islas que conocen su situación y que, de ellas, más de mil ya han recibido los nuevos tratamientos. Tal y como adelantó ayer este rotativo, el Servei de Salut ha dispensado un total de 1.106 tratamientos de acción directa contra la hepatitis C en las islas con un coste total de 42,3 millones de euros.

"El ministerio de Sanidad estableció una prioridad a la hora de dispensar estos tratamientos que fijaba que los primeros en recibirlos debían ser los F4 y F3 (los máximos niveles de afectación hepática) y después los pacientes que esperaban un trasplante, los trasplantados que seguían con la enfermedad y, por último, las mujeres embarazadas", explicó Buades, que añadió que en las islas ya han sido tratados los enfermos más afectados.

"Ahora lo que queremos conseguir es que reciban el tratamiento los pacientes F0, F1 y F2 (con el hígado afectado en menor medida) con un objetivo claro, que en el año 2030 solo se tengan que realizar trasplantes hepáticos por cirrosis alcohólica", deseó la presidenta de AMAHC.

"Mucha gente se ha quedado en el camino y los que hemos sobrevivido no hemos podido tener una vida normal, con relaciones de pareja estables. Pero ahora, con estos nuevos fármacos, hemos vuelto a sonreir a la vida. Antes, no tenníamos futuro", recalcó Buades.

Esta apreciación fue corroborada por la doctora Angels Vilella, hepatóloga del hospital de Son Llàtzer que reiteró que "los nuevos antivirales de acción directa libres de interferón son capaces de eliminar de forma sostenida la replicación viral".

Todavía existe un alto desconocimiento alrededor de esta patología. En la actualidad, las principales vías de transmisión son la realización de tatuajes y perforaciones en lugares que no cumplen las medidas de prevención adecuadas, mediante inyecciones o pinchazos accidentales con agujas contaminadas o por el uso de drogas inyectables intravenosas, entre otros. Y Vilella recordó que la hepatitis C es asintomática hasta que está en fase avanzada. Por ello, recomendó hacerse una prueba ante el mínimo síntoma. A saber, ictericia (amarillamiento de la piel), cansancio, inapetencia, orina turbia, dolor o hinchazón abdominal, entre otros.