El Consell de Govern acordó ayer poner en marcha la facultad de Medicina, iniciando los trámites para que la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (ANECA) apruebe el plan de estudios para el curso 2016-2017. El portavoz del Ejecutivo, Marc Pons, reconoció que esta decisión se toma con la frontal oposición de su socio de Pacto, Podemos, pero recordó que no necesita "tramitación parlamentaria, es una iniciativa legislativa que responde a una petición de la propia Universitat de les Illes Balears (UIB)". Pons no quiso entrar a debatir con Podemos y prefirió quedarse con los proyectos acordados en el seno pacto que con las diferencias.

La reacción de Podemos no se hizo esperar. Su portavoz parlamentaria, Laura Camargo, cargó contra el Govern y le acusó de "inaugurocionitis" con la Facultad de Medicina. Camargo relató que el Ejecutivo les dijo que no había presupuesto y ahora resulta que sí. "El Govern ha actuado de espaldas a Podemos y sin debate. Esta decisión vulnera los acuerdos del Pacto", apostilló la portavoz.

Por su parte, el conseller de Educación y Universitats, Martí March, señaló que "solo se trata de iniciar unos trámites para impulsar el plan de estudios que ya fue aprobado por unanimidad en 2011". El titular de educación explicó que si el informe de Aneca es favorable, será el Consejo de Universidades el que deberá dar su visto bueno, tras lo que ya se podrán solicitar las 60 plazas que plantea el plan de estudios. Acto seguido, la conselleria de Educación y Universidades podrá participar en la Conferencia General de Política Universitaria, donde se realiza el reparto de las plazas de nuevo ingreso en Medicina.

Por su parte, la consellera de Salut, Patricia Gómez, indicó que la Facultad de Medicina no supondrá ningún recorte, de los presupuestos ni de Salut, ni de Educación, ni tampoco de los recursos que recibe la UIB. En este sentido, explicó que la inversión son solo los 600.000 euros del coste de los estudios, ya que el Hospital de Son Espases cuenta con toda la infraestructura educativa. Patricia Gómez también indicó que en la actualidad los hospitales públicos están formando unos 500 médicos residentes de otras comunidades que nos cuestan 23 millones. Consideró que la Facultad servirá para apostillar esta formación.