El conseller insular de Cultura de Menorca, Joan Lluís Torres, denunció ayer un ´agujero´ de 1,8 millones de euros que podría estar causado por la anterior gestión del consorcio de Turisme Jove, y pidió la dimisión de la ex consellera de Presidencia y Deportes Rosa Puig (PP), que ocupa un escaño en la oposición del Consell de Mallorca.

Torres recordó que existe una deuda de 1,8 millones de euros por la construcción del albergue juvenil de sa Vinyeta en Ciutadella, gestionado y ejecutado durante el mandato de Puig, que "puede estar provocada por el comportamiento presuntamente delictivo de los responsables del consorcio".

Turisme Jove adjudicó la construcción del albergue, cuyas competencias de gestión fueron después traspasadas al Consell de Menorca, y suscribió un préstamo para financiar la obra civil.

Sin crédito

Sin embargo, los nuevos responsables hallaron el crédito agotado y todavía están pendientes de pago 1,8 millones de euros al constructor, los instaladores y la propia institución insular menorquina. Además de ello, el consorcio está amortizando los intereses de la póliza, lo que incrementa aún más su sangría económica.

Torres afirmó que "aquí ha habido mala gestión o corrupción, por lo que se deben asumir responsabilidades políticas por incompetencia o por complicidad".

"Por incompetencia -dijo-, dado que Puig no tenía ni idea de lo que estaba ocurriendo en el seno de su propia Conselleria, o por complicidad con los autores de las irregularidades económicas destapadas por la Fiscalía".