El president del Govern, Jaume Matas, afirmo ayer que la postura de los partidos de la oposición de dejar en suspenso la ponencia parlamentaria sobre la reforma del Estatut, ante la negativa del PP a blindar en el texto la actual composición del Parlament, es "un gesto mediático sin más importancia". Matas se mostró convencido de que "al final las aguas se calmarán y se reconducirá el diálogo".

Matas realizó estas declaraciones al acabar la reunión de la directiva regional del PP balear, en la que se acordó que el grupo parlamentario popular elabore una propuesta, que los populares presentarán también en los ayuntamientos, en la que se muestre el rechazo a que el Estatut catalán "altere las reglas del juego" en lo que se refiere a financiación autonómica.

En cuanto a la ponencia parlamentaria, Matas afirmó que su partido está dispuesto a "estudiar todo" y "hacer lo que sea necesario" para el diálogo, pero siempre "de acuerdo al sentido común" que a su juicio supone la postura del PP. Defendió que la ponencia trabaje en aquellos puntos en los que hay acuerdo y que los aspectos más complicados se dejen para el final y entonces celebrar reuniones a "alto nivel" para, en base al diálogo y "cesiones", alcanzar un acuerdo.

"También nosotros nos hubiéramos podido plantar por la negativa del PSIB a incluir la financiación en la reforma, pero esa no es una buena estrategia", dijo el president Agregó que el que la oposición pida que se implique en este asunto "demuestra que se trata de un gesto mediático sin más importancia".

Por otro lado, Jaume Matas quitó importancia a lo ocurrido con la pancarta desplegada en el estadio del Camp Nou y consideró que aunque estas actuaciones no son positivas, "no hay que magnificar" lo ocurrido.