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Ver galería >¡Hola a todos, queridos lectores! Seguro que muchos de ustedes, al igual que servidora, estamos navegando la temida cuesta de enero. Esa época del año en la que nuestra tarjeta de crédito parece que está practicando un baile peligroso, no solo por las compras navideñas, sino también por las irresistibles rebajas que se han unido a la fiesta. La pregunta que nos ronda la cabeza es: ¿cómo vamos a llegar a febrero intactos? Pero, hey, enero no solo nos trae preocupaciones financieras, también nos embriaga con la emoción de nuevos propósitos. El 2 de enero llega y todos entonamos el mantra universal: «año nuevo, dieta nueva». Los gimnasios se llenan de entusiastas dispuestos a quemar esos kilitos extra ganados durante las festividades. Sin embargo, si creían que lo lograríamos, les aseguro que aquí en Mallorca, al menos, la cosa se complica. Nos sumergimos de lleno en las celebraciones de Sant Antoni y Sant Sebastià, y con ellas, la temporada de espinagades, xulla, botifarrons, llonganissa, llonguets, y un largo etcétera de delicias culinarias. Pero no se preocupen, porque como le dije a mi nutricionista con una sonrisa en la cara: «todo es proteína y está elaborado a la plancha». ¿Quién puede resistirse a tan sabia filosofía? Y ahora, en modo plancha, vamos a contarles sobre los últimos eventos a los que hemos asistido. Esperamos que disfruten de nuestra crónica tanto como nosotros disfrutamos de estos momentos.
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¡Hola a todos, queridos lectores! Seguro que muchos de ustedes, al igual que servidora, estamos navegando la temida cuesta de enero. Esa época del año en la que nuestra tarjeta de crédito parece que está practicando un baile peligroso, no solo por las compras navideñas, sino también por las irresistibles rebajas que se han unido a la fiesta. La pregunta que nos ronda la cabeza es: ¿cómo vamos a llegar a febrero intactos? Pero, hey, enero no solo nos trae preocupaciones financieras, también nos embriaga con la emoción de nuevos propósitos. El 2 de enero llega y todos entonamos el mantra universal: «año nuevo, dieta nueva». Los gimnasios se llenan de entusiastas dispuestos a quemar esos kilitos extra ganados durante las festividades. Sin embargo, si creían que lo lograríamos, les aseguro que aquí en Mallorca, al menos, la cosa se complica. Nos sumergimos de lleno en las celebraciones de Sant Antoni y Sant Sebastià, y con ellas, la temporada de espinagades, xulla, botifarrons, llonganissa, llonguets, y un largo etcétera de delicias culinarias. Pero no se preocupen, porque como le dije a mi nutricionista con una sonrisa en la cara: «todo es proteína y está elaborado a la plancha». ¿Quién puede resistirse a tan sabia filosofía? Y ahora, en modo plancha, vamos a contarles sobre los últimos eventos a los que hemos asistido. Esperamos que disfruten de nuestra crónica tanto como nosotros disfrutamos de estos momentos.
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¡Hola a todos, queridos lectores! Seguro que muchos de ustedes, al igual que servidora, estamos navegando la temida cuesta de enero. Esa época del año en la que nuestra tarjeta de crédito parece que está practicando un baile peligroso, no solo por las compras navideñas, sino también por las irresistibles rebajas que se han unido a la fiesta. La pregunta que nos ronda la cabeza es: ¿cómo vamos a llegar a febrero intactos? Pero, hey, enero no solo nos trae preocupaciones financieras, también nos embriaga con la emoción de nuevos propósitos. El 2 de enero llega y todos entonamos el mantra universal: «año nuevo, dieta nueva». Los gimnasios se llenan de entusiastas dispuestos a quemar esos kilitos extra ganados durante las festividades. Sin embargo, si creían que lo lograríamos, les aseguro que aquí en Mallorca, al menos, la cosa se complica. Nos sumergimos de lleno en las celebraciones de Sant Antoni y Sant Sebastià, y con ellas, la temporada de espinagades, xulla, botifarrons, llonganissa, llonguets, y un largo etcétera de delicias culinarias. Pero no se preocupen, porque como le dije a mi nutricionista con una sonrisa en la cara: «todo es proteína y está elaborado a la plancha». ¿Quién puede resistirse a tan sabia filosofía? Y ahora, en modo plancha, vamos a contarles sobre los últimos eventos a los que hemos asistido. Esperamos que disfruten de nuestra crónica tanto como nosotros disfrutamos de estos momentos.
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¡Hola a todos, queridos lectores! Seguro que muchos de ustedes, al igual que servidora, estamos navegando la temida cuesta de enero. Esa época del año en la que nuestra tarjeta de crédito parece que está practicando un baile peligroso, no solo por las compras navideñas, sino también por las irresistibles rebajas que se han unido a la fiesta. La pregunta que nos ronda la cabeza es: ¿cómo vamos a llegar a febrero intactos? Pero, hey, enero no solo nos trae preocupaciones financieras, también nos embriaga con la emoción de nuevos propósitos. El 2 de enero llega y todos entonamos el mantra universal: «año nuevo, dieta nueva». Los gimnasios se llenan de entusiastas dispuestos a quemar esos kilitos extra ganados durante las festividades. Sin embargo, si creían que lo lograríamos, les aseguro que aquí en Mallorca, al menos, la cosa se complica. Nos sumergimos de lleno en las celebraciones de Sant Antoni y Sant Sebastià, y con ellas, la temporada de espinagades, xulla, botifarrons, llonganissa, llonguets, y un largo etcétera de delicias culinarias. Pero no se preocupen, porque como le dije a mi nutricionista con una sonrisa en la cara: «todo es proteína y está elaborado a la plancha». ¿Quién puede resistirse a tan sabia filosofía? Y ahora, en modo plancha, vamos a contarles sobre los últimos eventos a los que hemos asistido. Esperamos que disfruten de nuestra crónica tanto como nosotros disfrutamos de estos momentos.
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