No hace ninguna falta profundizar en las devastadoras consecuencias que ha tenido la COVID19 en la economía española y muy especialmente en lo que se refiere a nuestra comunidad, mucho más dependiente del turismo y del sector de los servicios. El Great Lockdown, el gran confinamiento que supuso la práctica paralización de la actividad productiva supuso una caída en picado del consumo y generó una gran incertidumbre que se ha traducido en la aparición de oportunidades insospechadas. Sea cuál sea tu sector de actividad, sea cuál sea el tamaño de tu empresa, sea cuál sea tu capacidad inicial para adaptarte a los cambios.
Toda crisis es una gran oportunidad, porque se ponen en cuestión la mayor parte de las reglas del juego y se genera una corriente aceleradora de cambios. En un entorno de economía darwinista las épocas de bonanza son poco propicias para la innovación, las propuestas disruptivas y los saltos evolutivos a modelos tecnológicamente más avanzados. Las épocas de crisis profunda, como la que nos ha tocado vivir, son el caldo de cultivo ideal para dar la vuelta a nuestras empresas como si se tratase de un calcetín, aplicando modelos de gestión y modernización que hasta hace muy poco estaban solo al alcance de unos privilegiados. En este sentido, la puesta en marcha del Plan New Generation EU es una oportunidad única e irrepetible que no podemos ni debemos dejar escapar. Se trata del mayor paquete de estímulo económico jamás financiado a través de la Unión Europea. Unos fondos que se concederán de manera finalista a lograr que la economía europea post-covid sea más sostenible, digital y resiliente. Hablando clara y llanamente, un Plan que establece las bases para dar el salto de la revolución industrial a la revolución tecnológica que democratiza el acceso a los mercados y consumidores y constituye una oportunidad fantástica para generar un modelo económico mucho más igualitario.
Mientras unos innovan otros lloran. En este nuevo escenario debemos distinguir entre quiénes tratan de construir muros para defenderse de los implacables vientos que soplan desde la tormenta de la Covid a esos otros que piensan más en erigir poderosos molinos de viento que canalicen toda esa energía y les ayuden a progresar en la pirámide empresarial. Si eres de estos últimos estás de enhorabuena. Nunca hasta esta fecha se ha abierto una opción tan potente para desarrollar propuestas empresariales verdaderamente innovadoras y competitivas. Al igual de lo que ocurre en la naturaleza, nos hallamos ahora de un periodo de gran extinción de especies. Muchas de las empresas que nos acompañaban en nuestro día a día no podrán adaptarse a los cambios y desaparecerán. Otras pequeñas especies que luchaban en el ecosistema por sobrevivir, verán como se desarrollan las condiciones adecuadas para que florezcan y serán las elegidas para gobernar la economía en las próximas décadas.
Evidentemente no será un camino fácil de transitar. Nos levantaremos y caeremos y muy probablemente cometeremos algunos errores. Pero este es un viaje que jamás debes iniciar solo. Debes acompañarte de los mejores, de especialistas que te guíen en todo el proceso, que te ayuden a escalar montañas, superar desfiladeros y que te garanticen que tu cadena de suministros funcionará como un reloj durante toda la singladura.
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