Dos días únicamente tendrá Óscar Troya, técnico del Poblense, para preparar con sus jugadores el partido de la segunda ronda de la Copa del Rey que enfrentará a los azulgranas con el Olot este próximo miércoles, a las 12:00 horas, en el municipal pobler. Un encuentro al que el conjunto mallorquín llegará con lo justo, ya que tendrá un mínimo de cinco bajas y tiene 20 fichas en plantilla. Osasuna será el rival en la segunda ronda del ganador de esta eliminatoria, que a priori no corre peligro. Se conocerá definitivamente este lunes, cuando a la plantilla azulgrana se le realice una nueva PCR para descartar más contagios en un equipo que ha conocido seis desde el pasado 13 de diciembre (su último partido, cuando jugó y ganó, por 2-3, el derbi ante el Atlético Baleares).

Salvo otro positivo en el Poblense -o en el Olot-, el partido se jugará el miércoles y los azulgranas, que volvieron ayer al trabajo de forma individualizada, llegarán en precario. Físicamente, por tener que pasar una cuarentena que ha roto el ritmo competitivo de los de Óscar Troya, y en número de efectivos, ya que el técnico tiene además cinco bajas por lesión. Mateu Ferrer, Lucas Gilardoni, Jaume Calonge, Pau Cendrós y Álvaro de Dios están descartados –y se está pendiente de los positivos- para el enfrentamiento copero.

Otro inconveniente para Troya es que solo tendrá dos días para preparar el choque ante le Olot. El equipo finalizó su cuarentena el pasado día 24, Nochebuena. El técnico dio festivo en Navidad y citó a los jugadores para entrenar este sábado. Los futbolistas se ejercitaron individualmente, ya que este lunes se les hará una nueva PCR y así lo marca el protocolo hasta conocer los resultados. Con el domingo como día de descanso, al cuerpo ténico solo le quedarán dos días de sesiones para preparar el partido ante el Olot, lunes y martes.

Una situación complicada que compromete el pase a una siguiente eliminatoria que tiene un suculento premio como es jugar ante todo un Primera División como Osasuna. El partido ya tiene fecha, el 6 de enero a las 19:00 horas. Sería el mejor regalo de Reyes para los mallorquines, que están siendo competitivos en su regreso a la Segunda B. Sin embargo, todo pasa por dar la talla ante el Olot. Una oportunidad que no pueden dejar escapar.